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2832 Words
Mía Ayer fue el día más traumático de mi vida y hoy fue el día más extraño de mi vida. No salí de la casa de la manada en todo el día de hoy. No me uní a Denny para el entrenamiento de manada. Me quedé con Joey la mayor parte del día. Y no fue extraño en absoluto; seguimos como siempre. Fue cómodo para ambos a pesar de todo. Era tarde en la noche cuando Denny y Jude finalmente regresaron a la casa de la manada. Era la primera vez que veía a Jude desde ayer. Vi cómo sus ojos se fijaron en los míos y me miraron en silencio. Empecé a sentirme un poco incómoda bajo su mirada mientras seguía ordenando mis sentimientos. Después de todo, fue su novia quien me tendió una trampa y él lo sabía. Vi cómo se acercaba lentamente hacia mí, mientras yo estaba parada allí sin saber qué esperar. Cuando llegó a mí, acercó mi cabeza a su pecho y me envolvió con sus brazos. Me abrazó fuertemente contra él. No sabía cómo reaccionar. Al principio, simplemente me quedé parada, congelada. Sentí su cabeza descansar sobre la mía y sus manos temblar ligeramente. ‘Jude...' Decidí que era mejor vincularme mentalmente con él. 'Maldición, Clover, lo siento mucho. No puedo creer que ella haya... es mi culpa. Lo que te pasó es mi culpa. Debería haberlo sabido. Las señales estaban ahí, y las ignoré. Dios, Clover, ¿puedes perdonarme?' Mis labios se separaron mientras tomaba un aliento tembloroso. No iba a permitirme llorar. Pero no puedo decirte cuánto me afectaron sus palabras. Luego hubo más sorpresa cuando me di cuenta de que me había conectado mentalmente con Jude. Sentí como si antes no pudiera hacerlo y ahora podía comunicarme con él naturalmente. Es extraño, sin embargo. Se siente diferente que antes. Como si estuviera comunicándome en otro nivel. 'Voy a contarle a Denny sobre Taylor. Terminé con ella y la encerré en confinamiento solitario para que no pueda escapar. Por favor, Clover, no te vayas. Esta es tu casa. Te protegeré mejor. Lo siento mucho.' Tragué el nudo que se estaba formando en mi garganta mientras mis brazos se movían alrededor de su cuerpo. —Jude, está bien—, le susurré. 'Esto no es culpa tuya. Esto habría sucedido eventualmente. Taylor fue solamente quien preparó la situación. Pero podría haber sido cualquier persona. Esta manada...' Respiré temblorosamente. 'Esta manada no es mi hogar. No puedo vivir en la manada Sulfur, Jude.'  El lugar que pensé que era mi hogar no lo era. Se suponía que yo sería la delta de esta manada, responsable de proteger al alfa. No podía quedarme aquí. Los tres siempre estarían preocupados por mí y tratando de protegerme. No podía vivir aquí, sin importar cuánto quisiera intentar que funcionara. No podía ser la pareja de Joey. Merezco ser querida, merezco no ser tratada como un intruso. Soy la hija de un alfa, por eso soy fuerte. No conozco todos los detalles de la guerra. Estoy segura de que hay dos versiones de la historia. Me pregunto si todos los miembros de la manada Chaos murieron... o si tal vez algunos permanecieron. Quizás algunos sean parte de los Buscadores. Tal vez debería intentar encontrar a los miembros de la manada Chaos. —Jude, ¿de qué se trata todo esto?— Denny se acercó a nosotros y me miró. Pude ver confusión en sus ojos. Obviamente, la habría porque no debería poder conectar mentalmente. Vi a Jude alzar la cabeza para mirar a Denny. —Denny... todo esto es culpa mía... — ¡JUDE!— Suspiré y negué con la cabeza. —Simplemente para. Déjalo ir. —No, ¡Clover! ¿Por qué debería dejar esto ir? Eres un oficial de la manada Sulfur. Este acto merece castigo—. Jude gruñó. —Y voy a obtener los otros nombres. Si tú no me los das... tengo otra fuente para conseguirlos. — ¿Quién?— La voz de Denny era un gruñido bajo. —Pudo haber sido cualquiera. ¡No puedes castigar a toda la manada! Y podría haber sido cualquiera de ellos. Solo porque algunos actuaron no cambia cómo la mayoría se siente. Es inútil. No importa. Me voy de aquí mañana, ya sea que encuentre otra manada o no. — ¡Clover!— Los ojos de Joey parecían heridos cuando se encontraron con los míos. Pude sentir su desconsuelo. Le sonreí ligeramente y negué con la cabeza. —No puede funcionar, Joey. Lo siento. Simplemente no puede funcionar—. Iba a decir algo más cuando Jude intervino enojado. — ¡Taylor! Taylor fue quien envió a Clover allá afuera completamente sola. La tengo encerrada en confinamiento solitario hasta que pueda ser interrogada—. Jude levantó la vista hacia mi rostro sorprendido. —No podemos castigar a todos. Pero podemos castigar a aquellos que actuaron según sus pensamientos. ¡Quiero que sepas que lo vales, Clover! Lo que te pasó no debe pasarse por alto. Estuvo mal. Y debemos mostrar a otros miembros de la manada que hay consecuencias por estas acciones. Miré la oscuridad creciendo en los ojos de Denny. Un gruñido bajo resonó en su garganta mientras daba unos pasos hacia la puerta. —Vamos a tener una conversación con ella. —Yo me haré cargo a partir de aquí, Denny—. El Alfa Scott dijo mientras entraba en la habitación. Vi cómo sostenía una mirada desafiante con Denny. —Escuché todo. Estás demasiado emocionalmente involucrado. Puedes acompañarme si quieres, pero yo me encargaré del interrogatorio. —Bien—, gruñó Denny y luego miró a Jude. —No tienes que venir.... —Voy a ir—, Jude respiró profundamente y se levantó. —Voy a seguir adelante con esto. Vi cómo Denny hizo un gesto a Joey. Sé que estaba diciéndole que me vigilara. Luego se acercó a mí y puso su mano en mi cabeza. Pude ver que había mucho que quería decirme. Sus ojos recorrieron mi rostro y luego se inclinó hacia adelante y me besó en la frente. —Sé lo que estás pensando. Pero vale la pena, Clover. Porque eres importante para nosotros. Lo que te pasó también nos ha lastimado y no lo vamos a tolerar. No tomes decisiones precipitadas—, Denny revolvió mi cabello antes de alejarse. Vi a Alfa Scott, Denny y Jude salir de la casa. No dije nada porque no podía encontrar mi voz. No esperaba esto. Pero también entendí que no se trataba solo de mí. Se trataba de establecer el orden. Estaba aquí por el Alfa. Cuando me atacaron, fueron contra su Alfa. —Clover...—, la voz de Joey salió apenas como un susurro. Giré la cabeza para ver sus ojos intensos clavados en mí. Había tantas emociones en sus ojos. Tenía que detener su pensamiento. Tomé mi decisión y no iba a cambiar de opinión. —Tienes una pareja en algún lugar, Joey. La encontrarás y la amarás. Algún día me agradecerás por alejarme. Te aprecio más de lo que crees. Por favor... no me lo hagas más difícil de lo que ya es—, le sonreí débilmente mientras lo veía asentir lentamente. Podía ver que estaba herido, pero estaba respetando mi decisión. — ¿Puedo al menos abrazarte esta noche? No intentaré nada. Solo quiero estar cerca de ti. Miré fijamente los ojos de Joey y asentí con la cabeza. Honestamente... sería agradable tenerlo cerca. Estaba ansiosa por mañana y lo que vendría después. Me preguntaba si debería mudarme a la ciudad y vivir como humana por ahora. Probablemente sería más seguro que vivir entre los hombres lobo. Esa noche, mientras estaba en la cama, pensé en cómo serían las cosas diferentes para mí. Esta sería mi última noche en la casa de la manada. Joey me abrazaba fuerte y tenía su cabeza enterrada en mi cuello. Su suave respiración acariciaba mi piel y su calidez era reconfortante. Pero tenerlo a mi lado no me emocionaba como debería. Esto me demostraba aún más que no tenía sentimientos por Joey. No podía quedarme con él solo porque era un buen chico. No sería justo para ninguno de los dos. Él encontraría a su pareja y se olvidaría completamente de mí. Me preguntaba cómo pude comunicarme mentalmente con Jude antes. No podía sentir a Sheena en absoluto. Esperaba que fuera una señal de que ella volvía a mí. Tal vez lo sea... Nunca antes había perdido a mi lobo para saber cómo funciona. Tenía que ser eso... ¿verdad? No quería pensar más. Cerré los ojos y me relajé... solo por un momento. *** —Entonces, ¿esto es algo ahora? Oí la voz de Denny y abrí los ojos. Para mi sorpresa, la luz del sol entraba. Parpadeé un par de veces y sentí el brazo cálido todavía envuelto alrededor de mi cuerpo. Los eventos de ayer de repente se agolparon en mi mente, despejando la niebla. Me senté y miré a Denny con los ojos bien abiertos. Oí a Joey gruñir protestando, pero lo ignoré. — ¿Qué pasó?— pregunté y vi cómo los labios de Denny se curvaban hacia abajo. —Taylor está siendo terca. Tendremos que seguir interrogándola, pero su destino está sellado. Será desterrada de la manada. No necesitamos un m*****o de la manada como ella—, los ojos de Denny estaban sobre mí y luego miró a Joey. Pude darme cuenta de que los dos estaban comunicándose telepáticamente. Lo cual me recordó que ya no tenía a mi lobo. —Los líderes de la manada ya han comenzado a llegar. Espero que mis oficiales estén listos y abajo en cinco minutos—, Denny levantó la mirada hacia mí y salté de la cama. Rápidamente agarré algo de ropa y me dirigí al baño. —Oh y Clover...—, me giré y miré a Denny por un momento. —Vamos a hacer todo lo posible para que este sea un lugar seguro para ti... supongo que lo que estoy diciendo es solo piénsalo... por favor. Asentí con la cabeza y cerré rápidamente la puerta. No podía pensar en eso ahora. No quería pensar en eso. En su lugar, me cambié rápidamente a un vestido marrón con margaritas estampadas. Recogí mi cabello en una coleta y me cepillé los dientes apresuradamente. Cuando salí del baño, Joey estaba saliendo lentamente de la cama y Denny todavía estaba parado allí. — ¡Apúrense o no tendremos tiempo para devorar el desayuno!— Vi cómo los dos hombres me sonreían mientras me daba la vuelta y salía de mi habitación. No iba a pensar en lo que significaba hoy para mí. Iba a disfrutar el día. Habría un banquete para todos los líderes de la manada y la comida sería de primera clase. Como una delta, esto significaba que no tenía que estar en las reuniones y podía echar un vistazo a la comida primero. Inhalé un trozo de tostada y luego me quedé en la cocina para ayudar a los cocineros. Podía ver que Joey tenía mucho que decirme, pero no quería hablar de nada de eso. Solo quería mantenerme ocupada. Afortunadamente, había mucho por preparar y los cocineros necesitaban toda la ayuda posible. Un momento después, Jude llegó. Sus ojos lucían cansados, pero tenía una sonrisa en su rostro cuando me vio. Obviamente estaba allí para cuidar de mí. Denny y Joey a regañadientes me dejaron para saludar a los líderes de la manada a medida que llegaban. Habíamos estado en la cocina durante algunas horas, y ahora era momento de sacar la comida. Estos eventos de la manada solían durar todo el día. Tenían una mesa de buffet constantemente repuesta con comida caliente durante todo el día. Y afortunadamente para mí, pude probar estos platos primero. —Déjame llevar eso—. Jude se acercó y yo lo ignoré. —Estoy lo suficientemente fuerte como para llevar una bandeja de galletas. Pero puedes llevar la sopa—. Sonreí mientras lo escuchaba reír. Seguimos a las otras criadas hacia el salón de banquetes y colocamos nuestras bandejas. En el momento en que lo hicimos, los demás lobos de la habitación se abalanzaron sobre nosotros. Principalmente eran otros oficiales que vinieron con su alfa. —Allí están ustedes—. Escuché la voz de Joey mientras apoyaba su mano en mi hombro. — ¿Puedes sacar más scones?— Escuché una voz y vi unos ojos dirigidos hacia mí. —Ella no es una sirvienta. Ella es una oficial—. Joey gruñó de inmediato. — ¿Una oficial? No jodas. Wow... lo siento por eso. Soy el gamma de la manada Chance, Logan—. Lo miré y le sonreí. —Soy Clover, la delta de la manada Sulfur. No hay resentimientos—. Extendí mi mano y estreché la mano del hombre. Logan tenía el pelo rubio y ojos marrones. Tenía una sonrisa blanca e increíblemente brillante. —Oh, ¿ya se acabaron los scones?— Escuché la voz de un hombre quejándose en la mesa de buffet. —Hay más en la cocina. Iré a traer la bandeja—. Miré a Joey hablando con Logan y Jude hablando con otro chico. No necesitaba que me siguieran. Estaba justo al final del pasillo. Rápidamente me escabullí hacia abajo y agarré otra bandeja de scones. Siempre eran los favoritos de la manada debido a la mantequilla de miel con la que estaban hechos. Entré en la sala de banquetes y puse la bandeja sobre la mesa. Al siguiente momento, sentí que alguien me agarraba del brazo y me apretaba contra su pecho. Tuve que levantar la mirada para ver quién era. Sin mis sentidos de lobo no tenía idea. Me encontré con los ojos tormentosos verdes de Denny. Joey y Jude aparecieron solo un instante después. — ¡¿Dónde estabas?!— Gruñó Joey mientras Denny soltaba un suspiro de alivio. —Solo fui a buscar más scones de la cocina. Tranquilos chicos—. Vi sus ojos de desaprobación y les sonreí. —Lo siento por preocuparlos a todos. —Hay muchos lobos aquí. Algunos que no hemos conocido antes. Quiero que te mantengas cerca—. Denny levantó la cabeza mientras más hombres entraban en la habitación. —Vamos a tomar un descanso para el almuerzo. La habitación va a estar mucho más llena. —Denny... probablemente no deberías tratarme como si fuera frágil—. Le di una sonrisa torcida e incliné la cabeza hacia un lado. Prácticamente, estaba pintando un blanco en mi espalda. —Solo quédate cerca—. Denny me soltó y envió un enlace mental a Jude y Joey. Demonios, odiaba no tener a mi lobo. — ¿Dónde está mi ángel? ¡Ahí está!— dijo un hombre de pelo moreno y ojos avellana cuando se acercó a mí. — ¡Mi ángel de los scones!— Extendió la mano y agarró las mías, sacudiéndolas emocionado. —He estado soñando con esos scones durante días. Mi alma se desmoronó cuando no pude encontrar ninguno. Entonces apareció el ángel de la misericordia. Oh dulce ángel de la misericordia, ¿cuál es tu nombre? No pude evitar reír. Este chico era tan dramático. Podía ver a los tres hombres a mi lado mirando a este hombre con fastidio. Pobrecito, no tenía idea de cuántas vibraciones mortales estaban dirigidas hacia él. —Soy Clover y son bastante fáciles de hacer—. Vi cómo sus ojos se abrieron de par en par. — ¿Puedes hacerlos? —Sí. Hice el último lote que fue traído—. Sonreí mientras él se agarraba el pecho. Extendió la mano hacia la mía y se arrodilló ante mí. Oh Dios, este tipo era cursi. —Cásate conmigo, diosa de los scones. Bendíceme con tu alimentación... y tal vez también con un buen rato en la cama como bono. Gruñidos se escucharon en la habitación y antes de que me diera cuenta, me jalaron hacia atrás detrás de Joey. Denny, Jude y Joey gruñían a este hombre y luego Logan apareció rápidamente a su lado. La tensión llenaba la habitación y se quedó en silencio. Iba a detener la confrontación cuando alguien más agarró mi muñeca y me dio la vuelta. Miré sorprendida mientras me encontraba con un par de ojos avellana familiares. El hombre tenía cabello castaño exuberante y mis dedos se presionaron contra su pecho esculpido. Mi boca se abrió en shock al reconocerlo. Era Conrad... el hombre con el que pasé una noche perfecta. Había cambiado mucho, pero era él. Demonios, era atractivo. Permanecí parada mirándolo como una tonta mientras inclinaba su cabeza hacia la mía. Su aliento rozaba mi mejilla, haciendo que mi rostro se sonrojara. Me sonrió mientras su otra mano me agarraba suavemente la espalda acercándome más. —Mía— Susurró suavemente mientras presionaba sus labios contra los míos.
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