El ruido de un pájaro hizo que me despertará, abrí los ojos poco a poco. Me di cuenta que estaba en una habitación con cortinas algo claras, el sol comenzaba a salir en ese momento. Me levanté y me quedé en la orilla de la cama, me di cuenta que estaba sin mi pantalón, solo llevaba puesta una camiseta algo grande para mi cuerpo. Mi ropa estaba acomodada en la mesa de noche, busqué a Asthon en la habitación pero no estaba. Escuché el ruido de unas ollas que provenían de la cocina. Me puse de pie y fui a inspeccionar. —Buenos días—saludó Asthon en cuanto me vio, me sirvió un poco de café—.Ten toma para que termines de despertarte—mencionó divertido. Solo me senté en una de las sillas a tomar el café servido. —¿Qué haces tan temprano levantado?—pregunte bostezando. —¿Acaso lo olvidas