perdoname

1569 Words
Era casi la medianoche, Valentín estaba consumido por el dolor que le causaba saber que Sophie, tenía que traerla consigo y cuidar de ella, pero juró que destruiría a cada uno de los que le hicieron daño en ese momento, podía llegar a la costa de noche, pero sería difícil volver con vida sino lo hacía antes del amanecer, así que debía ser cauteloso. El único que lo podía ayudar en ese momento era Elian. Valentín llegó hasta donde él estaba, en un club privado de Charleston, donde había mujeres y placer, un sitio dedicado para los licántropos, donde la lujuria y el placer estaba presentes. “Vaya, pero ¿a quién tenemos aquí? El vampiro más amargado de la ciudad, ¿no me digas que vienen en búsqueda de diversión?” Markus miró de arriba abajo a Valentín “No estoy para juegos hoy Elian, simplemente vine aquí porque necesito de tu ayuda” “¿tu? ¿de mi ayuda? ¿No estoy entendiendo nada? Si es que el vampiro perfecto todo lo tiene” Elian siguió en lo que estaba ignorando por completo a Valentín. “Mira imbécil, Sophie está en peligro y necesito ir a la puta costa por ella, pero no tengo tiempo para regresar antes de que amanezca, yo puedo ir y volver solo en un par de horas, pero con ella no lo puedo hacer, a ver cómo te explico. Cuando él le dijo eso a Elian, el semblante del licántropo cambio de inmediato. “¿Cómo que Sophie está en peligro? Hubieras empezado por ahí vampiro” Elián soltó a la mujer que lo acompañaba y salió con Valentín del lugar “¿Qué le pasó a la princesa? ¿y dime a donde tenemos que ir por ella’” “No necesito que vayas conmigo, simplemente necesito ir a la costa, pero en tren son 14 horas, tú tienes un avión privado, son dos horas en jet, necesito que me lo prestes y con él, tu piloto, te pagare, regresare con ella a Charleston, esta herida” “¿Cómo que esta herida? ¿tu como sabes en dónde está ella y todo lo que me estás diciendo? Voy contigo Valentín” “No es hora de que te pongas con estupideces, dime si puedes hacerlo” “Claro que puedo hacerlo, pero solo si voy contigo” “No quiero que vayas conmigo” “Pues no hay piloto privado, ¿tú crees que es simplemente decirle a esta hora que venga a esta ciudad y ya? Quien maneja el avión soy yo, ah sí que tú decides” para Valentín fue una difícil decisión, pero no que le quedaba otra opción, así que acepto, pues sus poderes sobrenaturales simplemente le daban para saber la ubicación de Sophie, más no para poder traerla hasta donde él estaba. Ambos arribaron hasta la gran mansión de Elian y se subieron en el pequeño avión privado de Elian, por fortuna para ellos, los abusadores de Sophie estaban consumiendo drogas y bebiendo alcohol, mientras pensaban exactamente qué hacer con ella, y no habían terminado completamente con ella. Sophie estaba completamente inconsciente a causa del maltrato y el abuso, apenas si podía abrir los ojos, la casa en donde estaba secuestrada, estaba rodeada por un gran espacio, ella solamente vio como una luz aterrizó por la ventana, no podía creer lo que estaba viendo, pensó que se estaba volviendo loca, del avión se bajaron Elian y Valentín. Dean y sus dos amigos estaban sentados en la sala de la casa, estaban bebiendo, cuando de repente la puerta se abrió con coraje, los tres se quedaron completamente sorprendidos cuando vieron los dos hombres. “¡Pero que mierda, esta hierba está fuerte!” expresó uno de ellos incrédulo, mientras que Valentín se acercó, lo tomó por el cuello, lo miró con fría, y lo apretó con tanta fuerza, lo levantó del piso. “¿Qué le pasa? ¿Qué le está haciendo?” Dean sacó un arma de su cintura, y le disparó a Valentín, pero evidentemente los tiros no lo afectaron en absoluto, Elian apenas lo tomó por el brazo y lo lanzó sobre una mesa dándole un gran golpe, el tercer hombre se fue contra Elian, pero a este también lo derribó con tan solo un puño en la cara. Valentín apretó el cuello del primer amigo de Dean, que lo ahorcó, dejando su cabeza colgando. Luego se fue directo hasta la habitación en donde estaba Sophie, ella cuando lo vio, se puso a llorar de inmediato, sus lágrimas rodaban sobre sus mejillas, no podía creer que él estaba ahí, cuando Valentín la vio en ese estado, quiso morir, y dar la vida por ella, estaba desnuda, Elian a pesar de todo lo que sentía, prefirió no entrar al cuarto, el sacrificio que tenía pensado hacer ante la luna, no tenía pensado hacerlo en el estado en el que estaba Sophie, pensaba hacerlo a través de un hechizo, no mediante el maltrato y el abuso. Así que omitió verla desnuda, mientras tanto, a Dean y a los dos hombres que estaban afuera, los desmembró con furia, les arranco cada parte de sus cuerpos, y los asesinó en venganza por todo lo que le habían hecho a Sophie, dejando cada una de sus extremidades regadas por toda la casa. Valentín desató a Sophie, la acarició, lloró sobre ella, la arropó con una sábana, la abrazo hacia él. La consoló un poco, y le acaricio su cara. “Sophie, perdóname por favor, yo prometí que iba a cuidarte y no lo hice, mira lo que te hicieron esos malditos miserables” “No es tu culpa” la voz de Sophie estaba apagada, estaba tan demacrada, por lo que los hombres le habían hecho que muy poco podía musitar palabra. “ellos, ellos abusaron de mí, Valentín” la voz de Sophie se quebró por completo, y comenzó a llorar desconsolada, mientras que Valentín la abrazó de nuevo hacia su pecho, él también estaba desconsolado, quería revivir a esos hombres de nuevo y volverlos a matar cien veces más, pues consideraba que nada haría pagar todo el dolor que Sophie estaba sintiendo en ese momento. “Te juro que te voy a cuidar toda la vida, nunca más voy a dejar que nadie más te vuelva a hacer daño, te lo prometo princesa, perdóname por haberte dejado ir, ahora te regresaras conmigo a Charleston” “Déjame aquí, yo me puedo cuidar sola” “No Sophie, aquí no puedes quedarte sola nunca más posiblemente se querrán vengar de ti por lo que les ha pasado a esos hombres, nunca más volverás a pasar estas cosas, estarás bajo mi lecho todo el tiempo, te cuidare porque te amo, y no ha pasado un solo día en que no deje de pensarte” “Pero es que tengo miedo Valentín, es que tengo mucho miedo” Sophie se aferró aún más a su pecho, y no dejaba de temblar, eso estaba volviéndolo loco, cuando estaba así aumentaban los locos deseos de Valentín y sus peores instintos, unos incontrolables, quería chuparle el cuello y succionar su sangre, si seguía así hasta podía dejarla sin vida en cualquier momento. “Sophie, necesito que te calmes por favor, te lo suplico, o me vas a volver loco, tú sabes que no soy normal, escúchame por favor, necesito que te controles, porque tenemos que salir de aquí antes del amanecer, necesito que te vea un doctor, estas muy débil” “Está bien, pero tengo miedo, no puedo evitarlo” “Estamos con Elian, por favor te lo pido de nuevo no lo mires a los ojos, no lo vayas a hacer” En ese instante Elian entró a la habitación, su vestidura estaba llena de sangre, al igual que su cara, su rostro tenía una expresión de satisfacción, Sophie evitó por todos los medios mirarlo, igualmente estaba tan aterrada que lo que menos quería era mirarlo fijamente. “Esos tipos eran unos miserables Valentín ¿Cómo has permitido que le hicieran eso a Sophie?” Elian estaba furioso “Son cosas que no pude controlar, estamos demasiado lejos de aquí” “Pero tienes malditos poderes sobrenaturales que se suponen pueden controlar este tipo de cosas, si no puedes protegerla es mejor que la dejes en paz, ella es una princesa, es la descendiente de Cleopatra, ¿en qué estás pensando?” “¡Cállate, Elian! La estas asustando aún más” “Es mejor que nos larguemos de aquí, corremos peligro, tráela al avión” Elian salió de la habitación, mientras que Valentín alzó con delicadeza a Sophie que apenas se quejaba por los golpes que tenía en su cuerpo. Durante el regreso a Charleston, ella se quedó dormida, iba envuelta en una sábana, llena de sangre, para Valentín, fue una de las situaciones más difíciles que tuvo que atravesar en su vida, pues la mujer que amaba no solamente estaba herida, sino que destilaba el preciado líquido que le encantaba beber, que lo volvía débil, pero que en un juramento habia prometido no volver a tomar. Se estaba volviendo loco, pero tenerla en sus brazos, era lo que más anhelaba, ella era la niña de sus ojos, su más grande y oscura obsesión, y todo lo que el destino le tenía preparado con Sophie Robinson, apenas empezaba.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD