Hubiese querido quedarme todo el día en mi habitación con él, pero el deber ha tocado a la puerta y aquí estoy terminándome de vestir para ir a la empresa. Pantalón largo color n***o adornado con lentejuelas del mismo color y una línea a los lados opaca, blusa sin mangas negra ajustada y tacones del mismo color, ese es mi vestuario el día de hoy. Termino de acomodar mi cabello, tomo mi bolso, y salgo de la habitación, para mi sorpresa él está parado justo afuera y lleva un traje gris con camisa blanca que me deja sin aliento, se ve guapísimo. —¡Wow!— Digo y me le quedo mirando de pies a cabeza. —Eso mismo digo yo. — Me dice acortando la distancia entre los dos. –Te ves increíblemente hermosa. — Continúa diciendo y me toma la mano para luego levantar mi brazo y hacer que dé una