BERLÍN, ALEMANIA.
Una traición.
Para algunos un acto tan deplorable como un asesinato y para otros algo tan leve simentado en su falta de moral. La traición no tiene perdón porque no hay forma de que una persona olvide el momento en que lo entregó todo y a cambio recibió algo peor que nada. Cuando un vaso cae y se hace trizas puede pegarse, pero nunca volverá a ser el mismo que fue antes de la caída, así mismo era la vida; No había forma de regresar a lo que fue ni tampoco de dejar pasar algo imperdonable.
Johan se quedó sin habla, mirando fijamente a su esposa quien al mirarlo se apartó del hombre que la tenía en brazos e intentó pensar tan rápido como fuera posible una forma coherente de explicar lo que su esposo acababa de presenciar, pero era imposible, pues a pesar de amarla com
