CAPITULO 22

2136 Words

GINEBRA, SUIZA. —Deja de moverte. —No me pongas alcohol—dijo ella mirando la herida con miedo. Eso ardia como el infierno y provocó que Henrik sonriera. Obviamente no le iba a poner alcohol. —¿Qué clase de doctor crees que soy? El alcohol no es recomendable para esta clase de heridas a menos que desees pasar una sesión masoquista de dolor y dañar la herida más de lo que ya está. —No, así está bien. Solo coloca una crema y una curita. —Deja de ser tan llorona. —¡Duele! —Yo sé que duele, pero por esa razón debes de tener más cuidado al cortar y no hacerlo con coraje. Tiendes a ser demasiado precipitada por las cosas, especialmente cuando estas molesta. Controla tu temperamento. Tessa frunció el ceño y le dedicó una mirada de desagrado. No estaba de acuerdo en lo que estaba dic

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD