Alexander Estaba frente a su familia, cada uno de ellos parecía estar conteniendo su carácter lo suficientemente. Estaban molestos, lo suficiente como para ahora fulminarme con la mirada, era asombroso como tenían a las enfermeras suspirando. Desde acá se escuchaba algunos buceos de lo que decían con respecto a ellos, incluso las pasantes se habían detenido a mirarlos. Sin embargo, apenas volteaban el rostro para verlos, parecían estar simplemente concentrados en la situación que ahora tenían frente a sus ojos. — Entonces tengo que asumir que este es el doctor idiota —subí mis cejas y miré de nuevo a Bri abrir la boca y cerrarla al menos tres veces, para luego mirarlos con el gesto contrario y furioso. Parecía en verdad enojada con ellos, lo que me daba risa, pues claramente ella l