Emma y Maite eran amigas desde muy pequeñas, pero el cariño que Emma decía sentir por Maite no era sincero, lo único que sentía era odio y desprecio y una infinita envidia. Emma odiaba que el padre de Maite le diera órdenes al de ella, y envidiaba la forma en que Albert sobreprotegía a Maite. A diferencia de Maite, Emma si viajaba a su país natal y cuando lo hacía se quedaba en la hacienda de los Heredia, a Elisa le encantaba que ella se quedará, pues le era agradable tener más gente en su casa, ya que solo eran ella y Marcos, y este último pasaba de viaje en viaje. Los viajes de Emma eran menudos, pues se había enamorado de Marcos y cada fin de mes viajaba para verlo, cada que volvía le contaba a Maite sobre un amor que tenía en el extranjero, con el cual se casaría apenas terminé la u