PVO Arthur.
Después de recordar aquellos tiempos, regresé a mi oficina. No iba a volver a la nueva casa de mis padres y verla a los ojos, no podía.
_Vaya, vaya, tu reunión familiar si que terminó rápido Arthur y que tal tu herm..
_¡Maldición!.-Lanzo una de las botellas de licor que tenía a mi alcance. Javier solo se queda mirando sorprendido, esperando una explicación.-¡Lo sabe!.-Golpeo el escritorio.
_¿Q-que?
_¡Digo que ella lo sabe maldita sea!.-Recuerdo sus lágrimas y me siento el más estúpido.
_¿C-como que lo sabe? No entiendo, ¿De quién hablas?
_¡¿Eres imbécil o que Javier?! ¡Hablo de Dulce!
_¿De la gorda?.-Lo miro con ganas de matarlo.
_Esta bien, está bien,¿De la pecosa?
_¡Javier!
_Ya, ya, es obvio que sé que te refieres a Dulce. ¿Que sabe ella?
_Sabe de la apuesta.-Abre su boca sorprendido.-De que me hice su novio y me acosté con ella por esa ¡Maldita apuesta que nunca debía hacer!.-Vuelvo a golpear el escritorio.
_¡No! ¡¿Pero como?! Tú dijiste que estabas seguro que ella no sabía.
_¡Eso creí! Pero no. Dulce ya lo sabía, creo que por eso se fue lejos sin darme alguna explicación.
_¡Oh my God!¿Y ahora que?¿Tus padres ya lo saben?
_No, según ella su madre no lo sabe y no quiere que lo sepa por el bien de la familia.-¡Maldición!
Se ríe y eso me da cólera.-Y tu apostabas que ella nunca se enteraría. ¿Y ahora que?
_¿Cómo que? Es obvio, no quiere verme, está molesta aunque ya lo superó, según ella.
_Mmm, esas cosas nunca se perdonan Arthur. Las mujeres son muy rencorosas y no creo que la enana sea la excepción.
_Javier, tu forma de llamarla ya me está molestando, más vale que la llames por su nombre por qué sino...
_De acuerdo, vaya hombre, en verdad estás furioso.¿Porque no solo la olvidas? Buscamos unas amiguitas.¿Que tal el bar al que fuimos ayer?
_¿Bar?.-Ese es otro asunto pendiente que no quiso aceptar.¿O me habré equivocado?
_Vamos, un par de tragos para celebrar el regreso de... digo, de Dulce Collins en tu vida, porque aunque lo odies, vas a tener que verla el día de la boda de tu padre.-Vuelve a reírse.-Ya quiero verla.
Si supiera que tan diferente está, se sorprendería.-Te odia, ¿Lo sabes?
Lo aparto.-¿Y porque?¿Yo que le hice?
_Tú eras mi mejor amigo y ella lo sabe.
_Bueno, ni que me importara acercarme a tu hermanita.
No digo nada. Aún estaba molesto, fastidiado por como terminó mi amistad con Dulce, si que tiene razón y soy un cobarde.
_¡Vamos hombre! Quita esa cara, hay lindas muñequitas que nos están esperando.
_De acuerdo.
Quizás tenga razón y un buen trago me ayude. Llegamos al dichoso bar donde nos encontramos ayer y debo admitir que habían hermosas mujeres que no nos quitaban la vista de encima pero en mi mente estaba ella, solo ella. La mujer irreconocible, insaciable, atrevida y coqueta con la que me acosté ayer.¡Si era ella! Algo me lo decía.
_¿Hola?.-Una voz de mujer nos alerta. No puede ser, ¡Otra!
_Hola primor.
¿Primor?
_¿Me recuerdas?
_Como olvidar tan hermoso rostro al despertar.¿Y que haces aquí de nuevo?
_Vine a tomar un trago.¿Y quién es él?¿Tu amigo?.-Ahora su cara cambia. Lo que menos quiero es estar cerca de una mujer.
_Sí, es mi mejor amigo, Arthur O'Reilly.
_¿Arthur?
_Oye Arthur, te está saludando. No seas descortés.-¡Dios pero que molesto! Mejor me hubiese quedado en mi apartamento a tomar solo. Volteo a verla.
_Ah hola ,un gusto conocer a la amiguita de mi amigo.
Apenas me ve, suelta la copa que traía en mano.-¡¿Arthur?!¡Oh Dios!
¿Eh?¿Acaso sabe quién soy? Javier me mira y solo encojo mis hombros.
_Sí, es él, y..¿Cómo se conocen?
La mujer no dice nada, pero si está sorprendida al verme.
_C-creo que debo irme. Me están llamando, un gusto.¡Adiós!.-La mujer sale más rápido que alma en pena.
_¡Auch!.-Siento un golpe en mi espalda.-¿Que?
_¿De dónde la conoces?¡Y no me digas que no la conoces porque no te creo!
_¿Que? juro que no la conozco Javier.-Hago memoria y nada. Siempre que he estado con una mujer han sido en ocasiones cortas, las recordaría.
_No mientas Arthur. Al menos no con Elena. Si te acostaste con ella y tuviste un ...
_¡¿Que?! Espera, espera, yo no la conozco y no es ninguna de mis mujeres como lo dices. Más bien, se nota que tú sí la conoces.
_Sí, nos conocimos ayer.-Responde molesto.-Al salir del bar nos encontramos, ella estaba algo tomada y yo como todo un caballero, la ayudé.
_Ya veo. La ayudaste a llevarla a la cama y acostarte con ella.-Vuelve a golpear mi espalda.¡Auch!
_Bueno, fue una linda experiencia, aceptamos que no estuvo nada mal. Intercambiamos números y...
_¿Que?¿Ahora es tu amiga con derechos?
_Mmm, no lo sé aún, pero tú la viste. Es preciosa, me gusta, así que quita tus ojos de ella.
_Sí, sí claro.
_Ay vamos Arthur hablo en serio, no vayas a quitármela.
_¿Que? ¡Santo cielos! Ya te he dicho que nunca la he visto en mi vida, además no es mi tipo.-Porque mi mente seguía a otro tipo mujer pero no iba a decírselo.
_¿Lo juras?
_Lo juro.
_Bien, te creeré, ¿Y entonces como sabe quién eres y porque huyó?
_Ni idea. Pregúntaselo a tu nueva conquista, a mí déjame fuera de esto que tengo mucho que hacer.
_¡Sr disculpe!.-Nos interrumpe el mozo.-Ayer a su bella dama se le cayó esto.
Me entrega un arete y Javier me mira con la boca abierta, lo que me faltaba, otro golpe en la espalda.
_Pero que bandido eres, ¡Te llevaste a una amiguita también a la cama y no me lo dijiste!. Ahora entiendo porque estabas así en la mañana.-No puede ser!.-¿Y quién es eh?
_No lo sé, ni idea, estaba borracho.
_Tú no estabas borracho ayer, o bueno, casi, pero si estabas conciente, vamos dime, como era esa mujer, porque por lo que veo sí te dejó feliz.
_Pues...-¡Dios no sé ni que contestar!.-Era solo una mujer más Javier. Nada relevante, además yo aún estoy...
_Si, si. Sigues con el remordimiento por lo que pasó con tu Dulce, pero no puedes estar así para siempre. Dijiste que ella ya lo olvidó, ¿No? Entonces tú también sigue adelante y punto.
_No es tan fácil Javier.
_¿Cómo que no es tan fácil?¿No me digas que al verla te diste cuenta que sigues enamorado?.-Dice y se ríe. Mejor que siga pensando eso, voy a la puerta.
_¿Que?¿Ya te vas?
_Eres insoportable Javier y no, no es eso, yo a Dulce Collins solo la puedo ver con respeto.-No hay manera ni siquiera que seamos amigos después del buen golpe que recibí hoy, creo que mientras más lejos mejor.
Salgo y voy a mi apartamento, me doy una ducha y decido descansar. Hoy fue un día agotador e inesperado, aunque más fue de sorpresa.
Estoy por comer algo, cuando recibo la llamada de mi padre, bendito padre. La tomo.
_Dime.
_Tienes solo unos minutos Arthur para que regreses a casa y le pidas disculpas a Amanda por lo que has hecho.
¿Lo sabrá? No, imposible. Ella dijo que no le diría.
_¿Y-y que hice?
_¡¿Cómo que hiciste?! Te fuiste sin decir nada Arthur, eso fue muy descortés. Ahora ven, que estamos a punto de cenar.
_Padre yo...
_Dije que vengas y no me hagas enojar.-Cuelga y ahí está su amenaza, increíble. No tengo mas opción y regreso a la casa familiar y ahí está ella, de lo más feliz conversando con su madre, pero al notarme acaba su alegría.
_¡Arthur! ¿Pasó algo en la empresa? Dulce dijo que te dejó en el primer piso pero no supo que pasó contigo.
_Lo siento Sra Amanda, sí, tuve una emergencia, descuide, ya estoy aquí.
_Menos mal. Recuerda que ahora soy como tu madre así que no me hagas preocupar.-¡¿Como mi madre?! debe estar bromeando.-Pero mira, llegas justo a tiempo. Dulce nos contaba de su novio.
_¿N-novio?.-Asi que tiene novio y ella se acuesta con un desconocido apenas llega a Nueva York, no se porque pero me molestaba saber eso.-¿Así?.-Me acerco sonriente y me siento en el sofá.-¿Y quién es ese afortunado? Vamos, cuéntame.
_Vamos hija, cuéntale lo que nos contaste sobre..
_M-mamá espera..
_...como te pidió matrimonio.-¡Que dijo!¡¿Matrimonio?! Esto no podía ser cierto.
_Eh pues, así es...-Intenta sonreír. ¡Así que el noviecito ese le pidió matrimonio!
_Vamos hija, dile que pidió tu mano en esa ruleta grande que está frente al río.
_¡Mamá que no!
_¿Que no que? No digas que se arrepintió a último momento y te dejó plantada porque no veo ningún anillo en tu dedo.-Esa mirada suya si que gusta.
_¡No! para que lo sepas Arthur, no se arrepintió, yo lo rechacé porque era demasiado pronto.
_¿Así?¿Entonces terminaron?.-La veo echar chispas.
_No, además no debería interesarte.
_Hija como dices eso. Arthur va a ser tu hermano y es normal que se preocupe por tí.
_¿Por mí?.-Pregunta intrigada.
_Sí, por tí, aunque no lo creas, me preocupo que cualquier mediocre esté con mi hermana.
_¿M-mediocre?
_¿Que? No me digas que no tiene oficio ni profesión.
_Arthur O'Reilly tú...
_No Arthur, todo lo contrario.-Interrumpe su madre sin darse cuenta que nos estábamos sacando los ojos.-Es un hombre de negocios muy conocido en Londres.
_M-mamá por favor...
_Tiene muchas empresas en varias partes del mundo y lo mejor, es que según mi hija, es guapo.
_¿Guapo?-Rayos, estoy apunto de romper el vaso.
_Sí, Dulce justo iba a mostrarnos una foto de su novio.
_¿Así? me gustaría verlo hermanita.-Otra vez esa mirada llena de rabia.
_Mamá ahora no, quiero descansar. He tenido un día muy cansado y mañana tengo que trabajar, ya saben.
_Querida, ella tiene razón, todo el día se la han pasado conversando. Dejemos que los jóvenes descansen.
_Ay lo siento Sr O'Reilly, es sobre ustedes, no sobre mí. En verdad me alegro que mi madre haya elegido a un buen hombre como usted.
_Gracias Dulce, y ya sabes que puedes contar con nosotros.-Me mira.-Arthur y yo las cuidaremos de ahora en adelante.
_Sí, las cuidaremos.
Su mirada era de una molestia intensa pero me daba igual. A los minutos, después de despedirse sube a su habitación, así que si se quedará a dormir después de todo.
_Si me disculpan, yo también debo irme.
_¿Te vas a quedar verdad Arthur?
_Por supuesto Sra Amalia, tengo muchos deseos de que Dulce me cuente sus aventuras en Londres. Quiero asegurarme que ese noviecito es alguien confiable y que no lastime a mi ahora hermana.
_Ay Arthur, gracias, confío en tí. Ambos son de la misma edad y se conocen desde niños, sé que volverán a ser como antes.
_Claro.-Eso era imposible, jamás sería como en esos años, pero al menos como su hermano tenía un pretexto.
Subo al segundo piso y busco su habitación, fue fácil porque en la entrada tenía una mini alfombra que decía “Prohibido cretinos" Pero en Francés, pero que lista mi hermana. Toco la puerta.
_Se que estás ahí Dulce, abre, hay algo que debemos dejar en claro.
Sigo tocando pero la puerta se abre.
_¿Dulce?.-Entro pero no hay nadie, avanzo hasta que escucho agua caer, así que se está bañando. Creo que mejor lo dejo para mañana.
_¡Es un cretino! ¡Un animal!¡Lo odio!
¿Que dijo? ¡Esta salvaje! No tengo que ser adivino para saber que habla de mí, mejor me voy antes que descubra que entré sin su permiso y me arme un escándalo.
Estoy por irme pero la puerta del baño se abre antes que termine de dar la vuelta y largarme de su habitación.¡Maldición no!
_¡Ahhh!.-Grita pero le tapo la boca, error, maldito error, al chocar mi brazo con su toalla que cubría su cuerpo, este se desliza y cae al suelo. Lo que veo, es el mismo hermoso y majestuoso cuerpo de mujer que ayer probé, comí y disfruté a mis anchas, ¡ahora sí estoy seguro! Además tiene marcas en su cuerpo y ese tatuaje, ¡Maldición, es ella!
_¡Imbécil!.-Me golpea pero aún así reacciono. Voy hacia ella.-¿Q-que? ¡No te acerques!
_¡Maldita sea acepta que tú eras la mujer de ayer Dulce!¡Vamos!
Está asustada, quizás porque yo aún no me había dado cuenta que ella seguía desnuda, pero estaba tan extasiado que solo quería que ella lo admitiera, que admitiera que le gustó lo de ayer y que ese noviecito suyo no significaba nada.
_¡Vamos habla!.-Grito y me clavo en su mirada, ella igual, sus ojos cafés siguen siendo tan hermosos, tan perfectos que quiero...
_¿Hija todo bien?.-¡Maldición! Recién reacciono y me doy cuenta de la situación.-¿Hija?
Me mira y no sabe que hacer,menos yo. Si su madre entra y nos ve en esta situación, no tendremos excusas.