No tuve mas remedio que trabajar en las invitaciones de la boda de Dante, ya era muy tarde para mi o mejor dicho lo decidí muy tarde. Yo había sido mujer de el cuando aquel día lo drogaron pero obviamente no podía decirle que era yo, eso me apena mucho. Dante fue mi primera vez y quiero que sea la ultima vez, asi que tengo que lograr que no se case y que lo haga conmigo. Abrí los datos que debían llevar las invitaciones y para mi sorpresa la boda era en tres días pero claro como era el hombre mas reconocido del pais, todos irían incluso si fuera hoy mismo y a esta misma hora. De repente Dante se acercó a mi escritorio. -Dante- Señorita necesito que vayamos a ver a un cliente muy importante ahora mismo. -Mariana- Pero señor estoy trabajando con sus invitaciones. -Dante- Deje eso señorit