Astrid tenían diecinueve años cuando conoció a Christopher, el chico más apuesto e inteligente de toda la especialidad de finanzas pero su atractivo no era nada comparado con su arrogancia, él era dos años mayor que ella. E día que se conocieron fue en un evento universitario, Astrid era una de las oradoras aquel día, cuando subió al estrado, Christopher no pudo evitar notar su peculiar belleza, la cual se escondía tras unos anteojos, cabello despeinado y una fuerte personalidad insegura, incluso aquel día fue motivo de burla ya que al momento de hablar por el micrófono, no pudo evitar tartamudear y olvidarse de su diálogo, terminando avergonzada ante cientos de invitados, a pesar de que había practicado por días no pudo contener su temor al hablar frente a personas. Pero ese día, lo que Christopher notó fueron sus redondos y grandes ojos cafés, largas y rizadas pestañas dificiles de percibir tras de aquellas gafas, unos labios carnosos, dientes blancos como perlas y una piel blanca que contrastaba con su cabellera castaña.
Al bajar del estrado, Astrid es interceptada por una figura alta, su rostro choca y es golpeado fuertemente por una chaqueta de frío cuero.
- lo siento- dice mientras acomoda sus anteojos. Se hace a un lado para seguir su camino pero su paso es nuevamente bloqueado. Aquel tipo que Astrid reconoce a la perfección la sujeta de los hombros con fuerza y sus labios son bruscamente profanados, una lengua entra en su boca, sus labios son mordidos y ella no sabe como reaccionar, al sentir la primer mordía intenta empujar aquel cuerpo fornido pero le es imposible. Cuando este individuo termina al fin de saciar su deseo, suelta a Astrid y se marcha como si nada, mientras ella permanece ahi sin saber como reaccionar, miles de sensaciones la invaden, aquella lengua explorando cada centímetro de su boca y se pregunta el por qué Christopher Expósito la ha besado de esa manera. Avergonzada sale corriendo hasta llegar a su habitación en los dormitorios del campus. Ya en la seguridad que su cama le puede brindar comienza a pensar y aunque el beso fue agresivo, la sensación que provocó en ella en un inicio fue de miedo, parecía que Christopher intentara arrancar su labio.....
Días después mientras Astrid caminaba hacia la biblioteca, ante ella se aparece una imponente figura que ensombrece su paso, al levantar la vista, Astrid mira fijamente los ojos verdes de Christopher. Colocando su pulgar sobre el labio de Astrid, proclama frente todos los presentes.....- ahora eres mía, esta marca demuestra que yo seré el dueño de tus labios y cada parte de tu cuerpo- Astrid no sabe cómo reaccionar, sus mejillas se tiñen de color rojo, todos la miran con intriga, comenzando a especular hacerca de lo ocurrido. Christopher besa los labios de Astrid antes de seguir su camino y dejar a la chica sin entender lo que pasa, solo escuchando los susurros de la gente que no aparta su mirada de ella......
- ¿ cómo es posible que Christopher se exprese así de esa chica?
- no entiendo, es alguien sin chiste, su cabellos despeinado y esos anteojos tan horribles -
.- quizá es algo excéntrico.
- pero yo lo he visto con chicas muy hermosas, no se que le vio a esa tipa.
Cuando la puerta de los sanitarios se abre y todo queda en soledad, la puerta de uno de los sanitarios se abre y de ahí sale Astrid, incómoda por lo que acaba de oír así que sale a toda prisa, intentando pasar desapercibida.
Al abrir la puerta de su dormitorio se encuentra a alguien acostado en su cama, al recordar lo ocurrido esta mañana, sin pensarlo lo golpea con uno de los cojines, haciendo que este se levante abruptamente
- ¿por qué me golpeas? - pregunta Christopher sorprendido
-¿que demonios haces aquí? ¿cómo entraste?
- solo vine a dejarte esto!! - Christopher saca una bolsa negra y se la entrega a Astrid - voy a pasar a las nueve de la noche por ti, usa esto- antes de salir de la habitación, Christopher se aproxima a Astrid para besar una vez más sus labios .. ....... Al salir de la habitación, Astrid se aproxima para revisar la bolsa que ha dejado Christopher y de ella saca un lindo vestido de terciopelo n***o, bastante descubierto para su gusto, no se explica que es lo que él pretende, que intenciones tiene con todo el espectáculo que acaba de montar ante todo el campus, pero admite que le gusta la sensación que Christopher provoca en ella, siente curiosidad de saber que pretende, ¿a dónde la quiere llevar?....... después de pensarlo un largo rato, al fin Astrid se levanta de su cama y va hasta las regaderas para darse una ducha y alistarse para esperar a Christopher.....
9:00 pm, la puerta de la habitación de Astrid suena y ella se levanta rápido de su cama para abrir..... Christopher la mira con asombro, su mirada la recorre de arriba a abajo, Astrid siente como si este quisiera arrancarle la ropa....
- dime algo Astrid, es obvio que sabes lo bella que eres, ¿lo que me gustaría saber es el por qué has querido esconder tal belleza?
- no intento esconder nada, es solo que es más cómoda la ropa que uso, me siento más segura.
- si así fuera, tu posición sería erguida y tú hablar fluido, pero no..... y ahora me intriga el por qué te has decidido a usar este atuendo...
- quizá tú presencia me hace sentir segura, no creo que alguien se atreve a hacerme daño si estoy a tu lado- responde ella sin lograr resistir su mirada
- tu respuesta me agrada..... vamos- Christopher toma la mano de Astrid y camina con ella fuera de los dormitorios donde todos miran a Astrid con incredulidad preguntándose ¿en qué maldito momento, la chica más simple e insegura de la escuela, se ha convertido en la sexi chica del guapo e inalcanzable Christopher Expósito ?
Salen del edificio y llegan hasta el auto deportivo que maneja Christopher - sube!- le pide mientras abre su puerta -¿a dónde iremos? - pregunta la chica, llena de intriga. Astrid mira a Christopher y no puede negar que es realmente atractivo, provocando que se sienta sumamente atraída ¿y a quien no podría atraerle un hombre como Christopher? alto, cuerpo atlético, cabello n***o y un poco largo, la barba que lo hace parecer más grande pero que es la debilidad de muchas chicas, un estilo casual y asquerosamente rico, claro que Astrid no puede negar que se siente atraída hacia él, pero lo que se pregunta es ¿que diablos quiere él de ella? sabe que puede tener a cualquier chica que quisiera, Astrid sabe que es atractiva cuando se lo propone, como en esta noche pero aún así no puede imaginar el por qué alguien como Christopher se ha acercado a ella....
- ¿ en qué piensas?- pregunta Christopher, sacando a Astrid de sus pensamientos.
- en nada..... ¿ya vamos a llegar? ¿a dónde iremos?
- si, ya casi ..... es una fiesta de fraternidad.
- pero ¿por qué me llevas a mi? ¿ por qué me has elegido a mi ?
- ya te dije!! ..... eres mía!- sentencia, dedicándole a Astrid una mirada intensa que provoca un cosquilleo que recorre su cuerpo .... aunque las palabras de Christopher son demasiado intensas, Astrid no puede evitar sentirse atraída hacia él, sus palabras posesivas hacen que su corazón palpite fuertemente.