Los ruidos comenzaron un poco más temprano de lo normal. Sara estaba acostada leyendo su libro y tuvo que dejarlo en la mesita de luz porque ya no podía concentrarse en esa tarea. Por eso aún no había logrado terminarlo, a pesar de que lo comenzó hace diez días. La mujer que recibía la v***a de Hakim la estaba disfrutando a pleno y parecía decidida a hacérselo saber a todo el edificio. Sara cerró los ojos y comenzó un pequeño juego que se inventó para no tener que ir a tocar el timbre de Hakim a la primera. Consistía en intentar adivinar si la mujer era alguien que ella conocía o si se trataba de una nueva amante. Está casi segura de que una vez pudo identificar a Paulina. Y otra vez le pareció escuchar a Vany; pero de esa no estaba tan segura. No conocía a la que gemía ahora mismo. Se