Cuando su cerebro despertó mucho antes de que su cuerpo, Kendall simplemente se mantuvo en la misma posición y con sus ojos cerrados, pensando en lo que podría haber llevado a su cabeza despertar primero.
Fue entonces, que un pequeño sonido bajo y preocupado, llenó el lugar nuevamente, lo que le asustó y le llevó a sentarse rápidamente en la cama.
Cuando abrió sus ojos, el omega se desorientó un poco al contemplar una habitación desconocida y escasamente iluminada gracias a la suave luz de una lámpara de noche.
Frunciendo sus cejas en confusión, Kendall intentó pensar en donde se encontraba, y entonces el recuerdo de haber recostado a Darío en su cama y Morgan haciéndole un masaje en su pierna apareció en su mente.
Instintivamente, giró su cabeza hacia su costado, pero ese lado de la c
