—No, ya se fueron. Solo que una de ellas creyó que podría burlarme dándome un número falso. Pero ni siquiera sabe con quién se metió. Quiero venganza. Solo te informaba de eso, Jhonatan, Ian y Kerem saldrán esta noche a beber. ¿Quieres venir con nosotros? —me comentó John, con su tono característico de querer sacarle provecho a la vida. —No —respondí de manera firme. —No seas amargado, Leonardo. Siempre atraes a las mujeres y eso es bueno para nosotros. Podemos pasar una noche muy activa —insistió, intentando persuadirme. —John, no me interesa. Además, tengo novia —repliqué, dejando claro mi compromiso. —Entonces los rumores son ciertos. Felicidades, amigo. Ya era hora de que sentaras cabeza —concedió, mostrando un atisbo de admiración por mi compromiso. —¿Y tú para cuándo? No puedes