Después de recibir aquella noticia de que tendrían cachorrito y cachorrita, Derek parecía mucho más alegre y eso, a su vez, emocionó muchísimo a Selena. Realmente era muy tierna su actitud y no podía evitar querer abrazarlo… aunque claro que no lo hizo, porque aún no estaba segura de qué sentía por él. En medio de sus pensamientos sobre sus bebés, también pensó en Ángela y en lo mucho que su amiga querría saber que tendría una parejita de sobrinos, niña y niño. —Enviaré el informe a tu oficina, Derek, ¿está bien? —preguntó la Dra. Adriana. —Perfecto, Adri. Nos veremos luego, tengo que enviarte un paciente que operé hace un par de semanas —se despidió Derek y le tendió la mano a su amiga, quien respondió al apretón de manos y luego salieron del lugar. Ya afuera, Derek acarició el abdom