Una novia para Philips

5. AMIGOS Y ALGO MAS

En vista de que mi padre me negaba la aceptación para trabajar en el bar seguí insistiendo, no me daría por vencida. Por esto sin que él se diera cuenta tomaba dinero de su billetera con el cual reuní una cantidad promedio con el fin de usarlo para las clases privadas que me daría Rosmery.

Ella al haber recibido el p**o acepto iniciar el entrenamiento en un espacio disponible que alberga el bar, el cual suele usar para practicar sus pasos asi como también para fumar ya que al parecer ella es adicta a la nicotina, adicción que comentaba que era un efecto secundario de su trabajo.

El día que me cito indico que fuese vestida con shorts cortos ajustados y un top, vestimenta que cumplí a cabalidad llevándola puesta.

Había acompañado mi vestimenta con una chaqueta para no lucir demasiado descubierta y unas botas obscuras de tacón con altura hasta los muslos, logrando con esto que luciera mucho mejor mi figura. Dicho atuendo notaba que hizo un efecto en Viggo, el cual al verme no disimulaba su atracción hacia mí, siendo asi me aproveche de guiñarle un ojo, gesto que respondió con una sonrisa.

Ese día comprobé una vez más su gusto por mí y debido a esto sería inminente el momento en el que le pidiera que quitara todo rastro de pureza en mí, algo que ansiaba que sucediera.

La clase la empezó Rosmery calentando el cuerpo, yo quise hacerlo de la manera en como lo hago cuando practico Pilates, ella por su parte no se opuso en que lo hiciera y solo siguió haciendo su calentamiento a su modo. Luego me indico que debía aprender primero el twerking y si lo manejaba bien pasábamos con el pole dance. La propuesta me pareció acorde y accedí, tenía presente que debía aprender lo más rápido posible. En primer lugar porque quería empezar cuanto antes en el bar ya que no pretendía seguir desempleada y segundo lugar ya que no podía seguir extrayendo dinero de la billetera de mi padre, no sabía cómo estaba su economía y por ello me motivaba en estar aquí, de esa manera podría averiguar lo que estaba sucediendo realmente.

Según lo que indicaba sobre el twerking, este no tiene normas fijas ni reglas establecidas. Algo que entendía mientras continuaba explicando.

—Moddie, debes separar los movimientos de la parte superior del cuerpo, esa zona se mantiene quieta con los de la parte inferior. Mientras movemos las caderas hacia los lados, hacia delante y hacia atrás, otras partes del cuerpo como por ejemplo las piernas y espalda, permanecen estáticos. De esta forma los movimientos de la cadera destacan y llaman más la atención. Exactamente como lo hago—mencionaba mientras llevaba a cabo cada movimiento.

Debido a mi confusión en el movimiento de cadera ella empezaba a detallar más específico.

—El primer paso es este, colocar tu cuerpo en cuclillas—refería mientras hacia la pose al igual que yo—. Luego sitúa las piernas dobladas y separadas más allá de la altura de los hombros y las manos en las caderas. Las rodillas se colocan alineadas con los pies, adoptando una posición similar a la que utilizaríamos para hacer sentadillas, luego nos agachamos tanto como podamos sin perder el equilibrio. El segundo paso es inclinar el cuerpo hacia delante y estando así con las manos en las rodillas, inclina el torso hacia delante y saca el trasero hacia fuera. Sin vergüenza, eh, y lo más atrevido posible —puntualizaba como si yo fuese una chica que le avergonzara moverse—. El tercer paso es mover las caderas y los glúteos, esto consiste en tirar las caderas hacia delante y hacia atrás para que los glúteos se muevan hacia arriba y abajo—en cada paso que explicaba lo simulaba muy bien para que de esa manera pudiera comprender.

Posteriormente pude hacerlo exacto como ella, diría que quizás hasta mejor ya que podía llegar hasta al piso, movimiento que a ella no se le hacía tan fácil a diferencia de mí, debido a mi inigualable flexibilidad la cual obtuve por las clases de ballet desde los diez años.

—¡Vaya Moddie! aprendiste muy rápido en tu primera clase

—Gracias Rosmery eso quiere decir que eres una buena profesora

—Te agradezco el halago aunque eso es lo básico, lo demás lo añadirás con la práctica y lo que vayas aprendiendo con el tiempo

—Ya veo ¿y el pole dance? ¿Me lo enseñas hoy?

—Por supuesto, para eso pagaste, vamos, eso debemos hacerlo en el escenario ya que allí se encuentra la barra donde debo dar la demostración de los pasos.

Dicho esto nos encaminamos al mencionado lugar, estando allí mientras me enseñaba los pasos los cuales eran diferentes y asociaba acrobacias y otra forma de bailar, notaba la vista fija de Viggo, esa que no me apartaba de encima desde donde estaba. Atención que me agradaba y demostraba admirándolo en diversas ocasiones.

Luego de también dominar el último baile, el cual se me dificulto un poco más que el anterior, observaba la presencia de mi padre quien había llegado hasta donde estábamos. Observándome perplejo, al poco tiempo subió al escenario completamente furioso, tras haberme sujetado del brazo de mala manera descendimos del escenario para dirigirnos a su oficina.

—¿Qué demonios estabas haciendo ahí? bailando como si fueses una puta más del bar, mírate como vienes vestida

—No soy eso, solo ensayo lo que haré cuando entre a trabajar aquí, y si eso me hace ser una puta porque bailo y me visto de forma sensual, algo que por cierto me encanta, pues déjame decirte que si lo soy padre.

El decirle esto de forma cruda desato su ira, la cual volvió a demostrar cuando me abofeteo dos veces. Lo hizo tan fuerte que sentí dolor en ambas mejillas.

—Párale a tu altanería Moddie Fletcher y controla esa manera tuya de ser. Si eso es lo que eres, controla tu puteria porque de lo contrario yo mismo lo haré y ya has visto como lo hago. Ahora marchate, ya te dije que aquí no quiero que estés

—Pues me veras padre y piensa hoy lo de mi propuesta, porque de no aceptar trabajare en el bar de tu competencia, ya lo decidí— dije semejante mentira para forzarlo a que me aceptara allí ya que no quería perder más tiempo, sabía que si lo seguía haciendo nunca reuniría el dinero que necesito

—Moddie, consigue trabajo en otro sitio, no te quiero ver aquí, esto no es un lugar para ti, entiéndelo hija

—No, tu entiéndelo, no quiero seguir trabajando en una cafetería con un sueldo miserable, quiero más dinero y sé que aquí lo obtendré, asi que piénsalo sino mañana me veras allá. Ya tengo el conocimiento del tipo de baile que manejan en estos sitios y con mi experiencia como bailarina te aseguro que les gustare, tú decides padre—manifesté para retirarme, ante esto quedaba molesto, era lógico que mi idea lo enojaba, sin embargo, no había marcha atrás.

Tras haber salido de la oficina agradecí a Rosmery por haber compartido su conocimiento, además, comente que planeaba trabajar allí, en ello le enfatizaba que no habría problema con sus clientes ni nada en su contra, ella ante esto preguntaba si estaba segura.

—Sí, lo estoy, más de lo que crees

—Pero eres muy joven para estar aquí

—Sí, lo sé, pero es solo mientras consigo el dinero que necesito

—Mmm ¿dinero?

—Si ¿porque lo dices asi?

—Disculpa lo que te diré Moddie, pero tu padre se queda con buena parte de lo que hacemos, asi que si trabajaras aquí deberás de hablar con él para que eso no te suceda

—Ya veo y si lo haré, asi como también veré cuanto es lo que toma de ustedes para asi brindarles su justa parte

—Gracias, que amable de tu parte, debo despedirme esta noche trabajo y necesito descansar, de nuevo gracias por el dinero

—No, gracias a ti por enseñarme, nos vemos—respondí para seguidamente dirigirme hasta donde se encontraba Viggo, quien al verme actuaba nervioso—. Hola Viggo—vocifere para luego mojar mis labios, a través de esa forma en la que reflejaba coquetería tomaba asiento en la barra

—Hola señorita Fletcher, veo que practicaba pasos de baile

—Sí, es que pronto trabajare aquí y debía aprenderlos

—¿Usted trabajara aquí?¿de veras?

—Efectivamente ¿Porque lo dudas? ¿Crees que no podré hacerlo?—preguntaba mientras lo detallaba

—No es eso, es solo que usted es muy hermosa para este lugar

—Gracias por el halago, pero el bailar me apasiona, por eso pretendo ganar dinero realizando algo que adoro

—Comprendo, siendo asi espero vaya todo muy bien

—Sí, también lo espero. ¿Podrías darme agua? Me encuentro un poco sedienta, tal parece que el baile me dejo agotada.

En vista de que al hacer mi pedido lo contemplaba como la noche anterior, con la misma mirada de provocación y deseo, pude notar como reaccionaba para luego responder.

—Por supuesto, acompáñeme, el agua la tenemos en otro sitio aparte—menciono indicándome que lo siguiera.

Nos adentramos en una habitación en la cual indicaba que mantienen el agua para los empleados, dado que adelante solo tienen licor. Mientras hablaba sutilmente cerraba la puerta de la habitación, acto seguido encendí la luz en vista de que lugar era un poco obscuro, tras esto empecé a aproximarme hacia él.

—Señorita Fletcher ¿qué hace?—inquiría ante la acción que había ejecutado, hecho que ignore y comencé a tocar su pecho aprovechando que ambos poseemos la misma altura

—No me digas señorita, solo llámame Moddie

—Pero…

—Shhh, déjate llevar, sé que también lo quieres—dije, interrumpiéndolo, en ello deslizaba mi mano hasta su zona intima, haciendo énfasis en su pene el cual a mediada que lo sobaba iba creciendo rápidamente.

—Wow ¿no sabía que fuese de ese tamaño lo que portas?—manifesté un poco asombrada, acto seguido comencé a desabrochar su cinturón, sin embargo, detuvo que prosiguiera

—Moddie, no es correcto

—¿Porque no? me atraes y yo sé que también te atraigo, solo déjate llevar—pronuncie a la vez que llevaba mis manos a su rostro para plantar un beso en sus labios.

Nunca antes había besado, diría que solo había visto como lo hacen a través de la web, por ello en ese instante lo pondría en práctica, algo que él me ayudaba en aprender ya que lo correspondió mientras me trasladaba a una encimera que estaba allí, en la cual pudo ubicarme con sutileza.

Después de estar posicionada de forma precipitada empecé a desvestirme, acto que el también hizo. Estando de esa manera quedaba asombrada con su físico, asi como su intimidad, misma de la que quería complacerme.

Al igual que mi vista se encontraba admirando su cuerpo él también lo hacía, mencionando que era aún más hermosa sin ropa. Antes de continuar indague sobre esa curiosidad, esa de si ya lo había hecho anteriormente.

—Si Moddie ya lo he hecho ¿y tú?

—No, esta es mi primera vez asi que espero sea magnifica—dije para pedirle que se acercara y me quitara todo rasgo de pureza en mí. Petición que el accedió en hacer, no obstante, antes de ello coloco un preservativo

—No quiero embarazarte asi que por ello lo hago— enfatizaba luego de colocarlo.

Habiendo acoplado lo que usaría para protegerme se acercó a mí, comenzó a besar mi cuello para seguir hacia mis senos, algo que me excitaba aún más. Con el paso del tempo detuvo esa acción a pesar que le pedí que bajara. Mi deseo era que me hiciera un oral, pero ante esto se negó, dijo que no suele hacerlo. Eso me disgusto, pero aun asi trate de no darle importancia y le insistí que solo me penetrara, sabía que estaba muy excitada porque mi sexo húmedo lo indicaba por ello lo anhelaba con locura.

El accedió y yo separe las piernas, colocándome en el borde de la encimera mientras él tomaba de ellas para poder empezar a adentrarse en mí. Notaba que mientras lo hacía se movía muy lento como si no quisiera lastimarme. Al tenerlo completamente dentro sentí un ligero dolor el cual se convirtió en satisfacción. Siendo de esta manera le insistía en que se moviera más rápido, petición que el dudaba en hacer y a la vez mencionaba que no quería hacerme daño. Debido a esto seguí insistiéndole y enfatizándole que no lo haría.

En vista de mi insistencia en lo que mencionaba, acepto, empezándose a mover más rápido. Al sentirlo de esa manera empecé a emitir gemidos más sonoros que los que me producen los juguetes sexuales que suelo usar.

Teniéndolo tan cerca comprobaba que le gustaban mis gemidos y lo demostraba en la forma en cómo se sonreía mientras generaba cada estocada.

Debido a que también quería moverme a mi gusto me aferre de la base de la encimera y le indicaba que permitiera que yo tomara el ritmo, el accedió nuevamente y comencé a hacerlo. De la forma en como me adentraba a su pene sentía que me gustaba cada vez más esa sensación de placer en mi cuerpo, logrando que vibrara y gimiera en repetidas veces.

De pronto sentí una sensación extraña en su sexo, este hacia unos movimientos peculiares dentro.

—Moddie... me voy a venir—pronuncio repentinamente, notando en el un gesto extraño en su rostro, como si sintiera un alivio por haber terminado.

Acto seguido saco su pene de mí y estando fuera observe que tenía una especie de líquido dentro del preservativo, uno que quería probar, pero él no me lo permitió, seguidamente retiro dicha protección y me ayudo a bajar de donde me había subido.

Me sentí nuevamente disgustada por el hecho de que se hubiera venido tan pronto, quería continuar, deseaba sentirlo por más tiempo, pero debía entenderlo, quizás el estrés del trabajo lo hizo que acabara de esa manera.

—Perdona... lo disfrute mucho... pero debo continuar el trabajo—refería con la voz agitada mientras empezaba a vestirse al igual que yo—. Gracias por permitir que yo fuese tu primera experiencia, aunque por ahora no estoy bien económicamente para mantener una relación contigo me gustari…

—No Viggo, no sigas, no quiero una relación, no es lo que busco

—¿Cómo dices?

—Solo quisiera que fuéramos amigos y algo más, ya sabes de esos que se cuentan sus problemas y tienen sexo

—Pero ¿porque? ¿No te gusto para ser algo más?

—No, no es eso, es solo que no soy una chica de esas que sueñan con tener novios y casarse. Quiero ser libre, además, nunca tendré un noviazgo con nadie, créeme, no eres tu soy yo

—Ya comprendo—menciono cabizbajo

—Pero acepta lo que te digo, serás el único con el cual mantendré relaciones—lo que dije lo hizo levantar de nuevo la mirada

—Me gustaste desde que te vi, por eso me ponías tan nervioso y pensé que con esto podríamos ser algo más, creí también que te gustaba

—Lo siento Viggo, si me gustas, pero no para tener una relación como la que quieres, lo que te mencione es todo lo que te puedo ofrecer—ante mi decisión se quedó pensativo para luego asentir como si hubiese accedido

—De acuerdo Moddie, acepto ser eso para ti—pronuncio para empezar a aproximarse. Con esa cercanía nos volvimos a envolver en otro beso que el esta vez iniciaba, uno que me complacía por lo bien que besa.

Viggo podría definirlo como un chico de excelente estatura, poseedor de una media melena obscura a la altura de las orejas, piel blanca y a diferencia de mí, sus ojos son azules. Diría que un atractivo extra lo tenía su rostro, ese de aspecto tierno que de alguna manera me atrajo.

Físicamente es como el típico chico bueno que algunas chicas quieren, pero yo solo lo quiero para saciar mis deseos asi como también para que me escuche cuando me sienta sola ya que al parecer es ese tipo de persona que es atenta.

Luego de haber compartido mi primera experiencia con el me pidió que lo esperara hasta la hora de su salida. Habiéndolo hecho cortésmente me invito a almorzar.

Estando en el restaurant le hable de mi como quería y viceversa. Según lo que dijo proviene de Canadá, tiene dieciocho años y al igual que yo también está reuniendo dinero para lograr su sueño, ese de ser un cantante reconocido.

—Moddie, asi como tu yo también quiero lograr mi sueño por ello trabajo en el bar de tu padre. Uno de estos días te llevare a donde vivo para demostrarte mi habilidad con los instrumentos

—De acuerdo ¿y qué instrumentos tocas?

—Guitarra y teclado, aunque también se tocar piano, solo que no dispongo de uno

—Increíble, eso es admirable

—Así como tu manera de bailar y la forma en cómo te moviste para ser tu primera vez—menciono, halagando mi destreza

—Gracias, son habilidades por las que destaco.

Al haber culminado la comida me acompaño a casa, estando ahí, de nuevo le pedí que estuviéramos juntos aprovechando que mi padre no se encontraba. Acepto y volvimos a tener otro contacto s****l en esta oportunidad llevándolo a cabo en mi cama.

Comprobé que al sacar un preservativo de su chaqueta poseía varios más, debido a esto comento que es una costumbre que suele tener ya que antes solía ser muy activo sexualmente y por ello se habituó a llevar varios. Le respondí que no importaba y que solo me volviera a producir ese placer que necesitaba.

Esta vez me situé boca arriba subiendo mis piernas sobre sus hombros, posición que quise ejecutar por la sensación que quería sentir de esa manera.

Comprobé que tal como lo pensaba era increíble, al empezar a penetrarme desde ese ángulo percibía la longitud de su pene asi como un alcance mucho más profundo. Debido a que quería sentir más placer moje dos de mis dedos y frote mi clítoris mientras él hacia lo suyo. Lo que sentía era increíblemente satisfactorio. No me importaba lo que dijera mi padre con respecto a esto, definitivamente me complacía mi sexualidad.

En vista de su delicadeza hacia mi aun mencionándole que quería que fuera brusco, suspendí con mis manos la cadera, levantando de esa manera la pelvis y tomando de nuevo el ritmo de la forma en como realmente lo deseaba.

Pasado unos minutos se vino aunque yo no llegue a hacerlo, solo me mojaba, pero no pasaba más, el clímax que esperaba no se hacía presente.

Estando a mi lado de a poco empezaba a percibir sus brazos sobre mí, aun siendo como es quería que fuese brusco, salvaje, no delicado, de igual forma decidí comprender, estábamos empezando y quizás por eso lo hacía de esa manera. Por tal motivo lo deje pasar y correspondí su abrazo.