Presente
Así pasamos el quinto año y nos encaminamos al sexto, que en resumen fueron mi tercera relación amorosa, otro casi despido y este coctel en el que usaría un vestido frente al cuervo. Esperaba que no se pusiese intenso con el mismo, era azul rey con un escote tipo barco y mangas largas abombadas. Llegaba hasta mis rodillas, y llevaba el cabello suelto.
Me había cambiado en uno de los baños de la oficina y me dirigí a la puerta de mi jefe para bajar juntos. Toco. Nadie responde, entro y lo puedo ver sentado en la silla viendo por la gran pared de cristal que da a la ciudad. Las luces iluminan todo el espacio, es una excelente vista de noche, yo también me la quedaría mirando. Toso un poco.
—Señor ¿está listo?
El cuervo entonces me ve con curiosidad y yo puedo observar que tien
