Era la segunda vez que dejaba a Perla a cargo de la revista. Si continuaba de esa manera, tendría que añadirla al testamento o volverla accionaria. La vez pasada me ausenté para acompañar a Samantha a Oregón. Esa ocasión era algo muy diferente. Se trataba de asistir al recordatorio de Charles y Erika en Charleston. Me sentía mal de no haber asistido a su funeral, así que esperaba compensarlo con el recordatorio. Solo tenía una noche para ponerme al día con todo en la revista, dejar las especificaciones para la edición de ese fin de semana y encomendar a las personas que se harían cargo de todo el proceso de edición e imprenta de ello, sin mencionar que debían enviarme todo digital a mi dispositivo para darles la aprobación; nada salía de ese edificio sin ser aprobado por la jefa de las je