RECHAZADO POR DRÁCULA

SORPRESA

Mientras en el despacho volvió a sentir algo y sonrió, desapareció en una bruma escarlata y asomo donde la modista y Larissa recién se estaba poniendo un traje de novia para medirla y hacérselo y el Rey la vio en paños menores y no se aguanto la risa e hizo gritar de susto a todas las que estaban ahí

—Jajajajaja, ¡oh disculpen!,jajaja, ¡ me equivoqué!,  era afuera que pensaba aparecer, jajajajaja

Y se desapareció a las miradas asustadas de todas de ver que era el rey en persona quien se les apareció, Larissa estaba sonrojada porque la vio en paños menores

—Hola, hijo

—Papá, ¿tú eres quien reía allá adentro?

—Oh si, jejeje me equivoque y aparecí allí adentro,  jajaja hubieras visto como se asustaron, jajajaja.

—Papá, algo viste por eso te reíste —dijo Julius

—Sí,  ¡vi a tu novia en paños menores! jajaja, ¡pero no sabía que estaba así! jajaja —dijo el Rey

—Papá, ¡no hagas eso!

—Calcule mal,venía a verte nada más, jajajaja —decía Drácula sin poder contener la risa

Julius sabia muy bien que no fue equivocación por la manera de reírse, pero mejor no le reclamo nada.

Drácula lo abrazo fuerte,  para todos solamente abrazaba a su hijo como padre, nadie sabía la oscura relación que existía entre los dos.

Vámonos a comer allá esos postres que te gusta tanto deja a las mujeres con sus vestidos, más tarde regresamos.

—Está bien papá

Y se fueron hacia el lugar que dijo su padre el Rey.

Se sentaron y en seguida los atendieron, les trajeron lo que pidieron, pero Julius vio a su padre enojarse y le dijo

—¡Papá que pasó?! Por favor no te enojes, dime que paso primero

—Yo pedí con chocolate y esto, ¡es café!

—Papá por favor, no te enojes, ellos trabajan para vivir y supe que el chico que atiende tuvo un accidente y quedo un poco sordo, ¡no lo mates, papá! —dijo Julius

—¡Está bien!, ¿pero hoy en la noche cumples tu promesa ah?

—Sí papá,  ¡te lo prometí!

—Está bien, entonces habla tú con Él, porque si lo hago yo ya sabes lo que puede pasar —dijo un enojado Rey

—¡Sí papá! —dijo Julius, haciéndole señas al camarero

Le dijo lo que paso, se disculpó y corrió a cambiarle de plato, se lo dejo y se arrodilló a pedirle disculpas, eso le gusto al rey la pleitesía le dijo

—Te disculpo, ten más cuidado otra vez

El chico se levantó agradeciendo y regreso asustado a su puesto de trabajo.

Drácula miraba a su hijo comer y le sonrió, le encantaba verlo, sus gestos, ademanes era como ver a su difunta esposa, Larissa al salir de la modista busco con la mirada y los vio sentados en la plaza de comida fue para allá saludo al rey con una venia y un beso a Julius

Vino otro chico a atenderla y le trajo lo que pidió ella, entonces el rey dijo

—Disculpa Larissa,  me equivoqué en la llegada y pues…jajajaja, ¡te vi en paños menores!  jajajaja

—Papáaaa, ¡no te rías! —decía un sonrojado Julius

—Su… Majes…tad,..que vergüenza me dio jejeje

Todos escuchaban como se carcajeaba el rey era estruendosa y Larisa al escucharlo reírse así, también rio y Julius no se quedó atrás.

Larissa al disimulo veía al rey comenzó a compararlo con Julius, era más hombre, más guapo, más varonil, más imponente, más alto, se imaginó al rey encima de ella desnudos los dos, se ruborizó y Julius se dio cuenta y pregunto

—¿En qué estás pensando Larissa?

Ella lo miro y dijo

—Todavía tengo vergüenza,  tu papá me vio casi desnuda.

—Oh, jejeje, pero no fue intencional,  eso lo debes saber—dijo un divertido rey

—Si, lo sé, pero me vio y me da vergüenza jeje

—Olvídate amor ya de eso, mejor disfrutemos de los postres.

Drácula miraba a todos lados para ver si le gustaba alguna vampira y llevársela a la cama, con lo que vio estaba excitado, sintió unos ojos mirándolo giro y la vio, era una hermosa vampira, se levantó y dijo

—¡Con permiso! No me esperen yo voy más tarde.

Camino hacia la mujer que le sonrió, le dio la mano,  ella se sonrojó y se desaparecieron de ahí.

La llevo a una habitación que era para huéspedes, ella estaba con la boca abierta mirando el lujo entonces Drácula se paró junto a ella mirándola y dijo

—¿Quieres estar conmigo?, ¿te gusta el rey?

—Su majestad siempre me ha gustado, pero no me he atrevido a decirle nada usted es el rey y yo solo soy una plebeya.

Drácula sonrió mirándola, era una mujer hermosa, con la ropa que estaba se le veía un hermoso cuerpo, la abrazo y le olió el cabello, tenía un aroma a azahares le gusto, pero también sintió que no olía a hombre… Era virgen, eso le gusto, con razón estaba nerviosa.

—¿Eres virgen?—dijo el Rey

Ella lo miro preguntándose…¿cómo lo sabe?

—¡Si majestad! —dijo la chica

—Bien, bien, ya que estamos aquí, quieres que yo sea el primero pues bien,  ¡eso se hará!,  jajaja.

Con un ademán mágico la desnudo, ella se tapó en seguida los senos y sus partes intimas, eso hizo reír al rey que se le acercó y dijo

—Solo yo voy a verte,  saca tus manos, no te tapes, déjame ver tu hermoso cuerpo.

Ella estaba sonrojada, saco sus manos y Drácula vio los senos redondos y las aureolas rosadas virginales y su monte de venus de un color claro, entonces así mismo hizo un ademán y quedo desnudo ante ella que se quedó con la boca abierta, viendo ese tremendo cuerpazo del rey y su… v***a enorme

Drácula al verla se carcajeó, la tomo de las manos y se metieron al baño, abrió la llave del agua y empezó a caer agua de la ducha, el Rey recibía primero el agua por lo enorme que era, se enjabonaron, se enjuagaron, se secaron con la magia del rey, la cargo y la acostó en la cama.

—Como te llamas niña —dijo el rey

—Clariel majestad

—Clariel, lindo nombre, ¿Yo te gusto Clariel? —dijo Drácula

—Sí su majestad,  desde niña siempre me ha gustado

—Bien se te va a cumplir tu deseo, me vas a disfrutar a tocar y seré, ¡el primer hombre en tu vida!

Se le acostó encima de ella, Clariel sintió el enorme peso del rey, con sus manos le acariciaba el cabello su frente sus brazos, mientras Él empezó a chuparle los pezones despacio al principio viéndola arquearse de placer, pero después empezó a chupárselo muy fuerte que hizo doler a  la chica

—¡Me duele majestad!—dijo la chica

Él la miro sonriendo, y dijo

—Tú quisiste estar conmigo, pues haces lo que yo digo, ¡soy el rey!.