Por no confiar en ti...

1543 Words
Por no confiar en ti.... "2da parte de por confiar en ti" - Si, esta hecho un bombón, amiga, si me hubiese hecho esa invitación a mí no lo dudaría ni un segundo, ya lo tendría en la cama de algún hotel. Me dice Sandy a mi lado, pues hace unos días en una fiesta de la compañía para la que trabajo tuve el placer de conocer al hijo de los dueños, lamentablemente yo no sabía quien era, hasta que se despidió diciendo su nombre. Fernand Garzon Rinaldi.... Estaba que me moría, como le pude hablar con tanta confianza, le dije que deberían darnos una hora más de almuerzo, algunos no podemos pagar la comida de la empresa porque pagamos por la Universidad, la matricula, alquiler, en fin, no todos somos hijos de una familia importante. Soy huérfana y lamentablemente no he tenido padres que me amen como la mayoría, pero él parecía interesado en mi charla, claro, debió haber pensado que soy solo una aprovechada que quiere todo gratis, pero no es así, solo me gustaría que hubiese comida más a mi alcance, sinceramente creo que a mi alcance solo una manzana. Mi nombre es Danna Gray y esta en mi triste desventura. Nací en una familia a la cual no le interesaba criar a una hija, mi madre me dio en adopción cuando tenía apenas meses de vida, así que jamás le intereso regresar por mí, fui de familia en familia, pase por muchas cosas, incluso padres que me maltrataban, solo cuidaban de mí, o decían hacerlo para cobrar el cheque que el gobierno les entregaba, incluso en una ocasión intentaron abusar de mí, pero tome un florero y golpee al hombre que se suponía era como un padre para mí, por su puesto me echaron y nadie creyó mi historia, aun así jamás me di por vencida. No tengo una familia, ¿Y que? Muchos no la tienen, el mundo no se acabará para mí, cuando por fin cumplí mi mayoría de edad decidí que la vida sería maravillosa, a partir de ese día, lucharía incansablemente para conseguir lo que deseaba, quería ser una pediatra, jamás asistí a una, de hecho una asociación que ayuda a personas necesitadas me socorrió en una ocasión que tuve un accidente, cuando tenía alrededor de 8 años, por ello es que deseo también algún día salir adelante y poder ayudar a más niños como yo, que lamentablemente no tienen una familia que los quiera, que son niños que no fueron deseados y dejados en el abandono, muchas ocasiones me pregunto si mi madre algún día piensa en mí, si se arrepiente de haberme abandonado, pero jamás me busco, incluso yo pedí saber quien era, pero me negaron esa información porque ni el estado sabía quien era yo, mi nombre me lo dieron cuando mi madre me abandono, porque solo eso les dijo, que no podía cuidar más de mí, mi nombre, pero no tenía un documento legal, hay muchos Grays y Leons en la ciudad, a saber quienes serán. Deje de pensar en ello, si ella no quería saber de mí pues yo tampoco quiero saber de ella. Cuando me dejaron ir de las casas de acogida, lo primero que hice fue conseguir un empleo, el hombre que me contrato era el dueño de un restaurante de hamburguesas, me trataba muy bien, era amable, una tarde me pidió ayudarle a cerrar, yo lo hice porque no tenía desconfianza, me había prestado un pequeño cuarto que utilizaba como bodega, pero para mí era suficiente, cuando cerramos él me dijo que saldría por la parte de atrás, que así la gente creería que él estaba aquí y no correría peligro de que algún hombre intentara entrar por la fuerza, pero el intento aprovecharse de mí, luche contra él y aun cuando era muy fuerte logre zafarme, escape corrí tan lejos como pude, pero solo termine como inicie, sin nada. Una mujer que me vio en la banca del parque me ofreció su hogar, ella me presto una habitación por unos días, hasta que pude reunir dinero para alquilar un pequeño piso, es muy pequeño, pero para mí esta perfecto. Cada noche observo por la ventana, miro al cielo y me pregunto que me depara el destino, si algún día podre concluir con mis estudios, es mi sueño, ser un médico pediatra. Hace pocos días comencé a trabajar en esta compañía, es de las mejor pagadas de la ciudad, pero claro, un empleo en el área de copiado no es mucho. Pero me da para comer, pagar alquiler, la luz, y mis pasajes de autobús para ir a la Universidad y ahorrar para los gastos futuros. La medicina es costosa, pero tengo fe que puedo lograrlo. Sandy es ahora mi mejor amiga, jamás tuve una, así que todo esto es extraño para mí, su madre me ha invitado a comer a su casa en varias ocasiones, Sandy estudia Arquitectura, pero trabaja aquí como asistente de un jefe de departamento. Ella es muy graciosa, me hace sonreír con las cosas que se le ocurren. La otra noche nos preparamos para ir a la fiesta de la compañía, es un evento que hace cada año para los empleados el dueño, Sandy me presto un hermoso vestido color n***o, un escote y espalda descubierta, no quería utilizarlo, pero tanto ella como su madre insistieron, me sentí como una princesa cuando me vi arreglada, siempre llevo mi cabello suelto, es lacio así que no necesita mucho, mis gafas, pero ese día no me las puse a petición de Sandy... Cuando llegamos a la fiesta ella no tardo en abandonarme, tanto rogarme que la acompañara para al final dejarme sola. Estaba en la barra, bebiendo solo refresco cuando escuche esa voz tras de mí, desconocía de quien se trataba, que pena me dio enterarme. -¿ Disfrutas la fiesta? Me pregunto con una voz gruesa y varonil, esa que te hace sentir una especie de cosquilleo en los oídos. - Pues la verdad no, mi amiga me obligo a venir, ya sabes para acompañarla, pero al primer momento me cambio por un chico guapo. Le señalo a donde esta Sandy ahora mismo. - Si, te comprendo, mi padre me obliga a venir a estos eventos, pero jamás te había visto aquí. - No yo, no trabajaba aquí, comencé hace poco. - Comprendo, y dime donde trabajas, en que área. - Orgullosamente soy la chica de las copias, cuando necesites fotocopiar algo, soy la chica indicada. Él deja salir una sonrisa cuando bromeo con él. - Vives cerca de aquí, con tus padres supongo. Cuando dice eso me quedo pensativa, mis padres, personas que no conozco. - Discúlpame, no era mi intención ser entrometido. - No, tranquilo, soy huérfana, así que vivo sola, jamás conocí a mis padres así que.... Él se queda serio, me observa y asiente. - Bueno, creo que en ocasiones cuando tienes padres que no te aman es mejor estar solo... Parece comprender mi situación, este chico me agrada, claro, es muy apuesto, alto, cabellos castaños, ojos preciosos color aqua, parecen brillar al ver mi collar. - Una mujer que me acogió cuando era pequeña me la obsequio, decía que era una reliquia de su familia, ella enfermó y me la dio cuando estaba muriendo, fue la única mujer a la que considere como una madre, lamentablemente partió, pero me quede con esto, es valioso, pero aun en mis peores momentos jamás me deshice de él, era algo a lo que me aferraba... Charlamos cómodamente, yo le conté que la comida en la compañía era costosa para alguien como yo, que paga por sus estudios y por vivir, él se quedó pensativo, de un momento a otro un joven se acercó a él y le dijo algo al oído. - Debo irme, pero me gustaría que volviéramos a charlar, podría invitarte un café... Yo solo le respondí con un ok, jamás me habían invitado a salir, y él era tan apuesto, no sé que podría ver en mí. Me dio una tarjeta y cuando vi su nombre me quería morir. Yo quejándome de la compañía y resulta que es el hijo de los dueños, Dios.... - Fue un placer conocerte.... Y enseguida le dije mi nombre, aun con su tarjeta en la mano. Danna, Danna Gray. Señorita Gray, nos veremos después. Se va caminando con ese porte hasta llegar con el dueño de la compañía, no creí que fuese su hijo, él tiene el cabello castaño oscuro, pero la mujer al lado de ellos es castaña a sí que supongo es su madre. En ese momento y sintiendo tanta vergüenza por lo que le dije decidí ir a casa, le envié un texto a Sandy quien no paro de reír cuando le conté la verdad. Al contrario me decía que debía aprovechar, pero, como confiar en un importante empresario, que podría querer con alguien tan insignificante como yo, no valgo nada a comparación de él, quien viene de una importante familia, solo verlos puede saberse que son muy ricos. Seguramente él debe tener damas de sociedad interesadas en él, sueñas Danna si piensas que él desearía algo en serio contigo. Me repito a mi misma una y otra vez.
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