Thriller.
Despeino mis cabellos, esparciendo un poco de mi crema especial anticaspa, admirando en el espejo del cuarto de baño mi sexy y perfecto reflejo, imaginando los millones de escenas que se desplazan por mi cabeza en la manera perfecta para ofrecerle la mejor sorpresa de su vida a una mujer que se supone lo ha tenido todo en su vida.
Trago, lo hago porque el solo recordar la cercanía, sus bellos ojos verdes esmeralda que me han hechizado más de lo que podría aceptar, o de lo que aceptaré en su cara porque siendo honestos mi orgullo podría pagar cuentas si así quisiera.
—Estoy aquí para llevarte a una sorpresa —demando señalando a mi reflejo con mi cepillo dental, mientras la menta inunda mi cavidad bucal, ofreciéndome un sabor que es más que necesario si quiero comerme su boc
