“No podría pedirte algo así, apenas sí nos conocemos y yo no busco un esposo para que sea real. Pero estoy en medio de una situación en la que tengo que tener un esposo, ya se que suena complicado y egoísta, pero es así.” Explicó ella. Ariel se había sorprendido de que Norman se ofreciera, llevaban nada conociéndose y no era normal que él se ofreciera a algo así. Ni siquiera se podía considerar que fueran cercanos. “¿Por qué no me explicas la situación? Obviamente tampoco quiero casarme contigo para que seas mi esposa de verdad.” Ariel desvió la mirada de la suya. “Sino porque necesitas ayuda. Tampoco creas que me ando ofreciendo a cualquier persona para ser su esposo, Ariel.” “Ese tipo de ayuda no se consigue de la noche a la mañana, Norman. ¿Estás seguro de eso?” “Entonces aprovech