POV Eva
Arton Me mantiene sobre sus caderas, sus labios no se separan por ningún segundo de los míos, su cuerpo está excitado y pegado contra la pared, mientras siento como sus manos se deslizan en mis muslos.
No puedo soportarlo, se siente tan bien, sus manos son como plumas, a pesar de ser grandes y varoniles su toques son tan delicados. Inconscientemente lo rodeo con más fuerza, atrayendo su cadera hacia mí. Ese bulto que no quería mirar hace tan solo unos segundos, ahora estaba completamente pegado hacia mí, y quería más, la presión que hacía contra mí era completamente enloquecedora.
—Oh Eva —dice mi nombre, apartando sus labios de los míos para bajar rápidamente a mi pecho, donde comienza a succionar el nacimiento de ellos—. Déjame tocarte más, Eva te juro que no soporto más, me
