—Espero que te lo metan bien… digo no, el desayuno bien. —Se pone divertida y luego se gira para dejarme con las ganas. Dejé que se fuera, la verdad habían muchas personas que no estaban aptas para ver nuestra escena. Ay Dahiana, si me dieras la oportunidad, supieras que no te dejaré caminar por un largo tiempo, no entiendo cómo existen hombres que no complazcan a las mujeres. Bueno, yo soy uno de esos, pero a Dahiana le daría todo lo que pide, me lo pone tan difícil que se lo ha ganado, me tiene en sus manos, me excita con facilidad y solo por eso se lo merece, no es una fácil como las demás chicas. Entiendo que como conoce su cuerpo, el placer es más abundante, pero algunas veces es triste hacerlo solo, el cuerpo humano a juro necesita el calor de otro cuerpo, no un juguete frío adent