-¿No me vas a decir nada? -No, yo misma le dije que lo hiciera ¿recuerdas? -Sí, pero…-- -Está bien si quieres hablar con ella, no pasa nada. -No quiero incomodarte, si no quieres que la vea, no lo haré. -Sabes que no te dejará tranquilo si la ignoras, y ya me voy haciendo la idea de lo insistente que es. -Lo es. -Bueno basta de ella, tengo que terminar esto, no más interrupciones, señor Dermoth. -Hoy tenemos una cita, SEÑORA DERMOTH. -Sí, justo después que un doctor vea tus manos. -Sí, y a ti te hagan un chequeo completo. -Ya te dije que no tengo nada, Collin. Suspiró cerrando de golpe el MAC (computadora Apple) de Collin. -Amor, vi como azotaba tu cabeza en la pared, sé que te duele, no soy tonto. -No es nada. -Si tú no vas, yo tampoco. Se cruzó de brazos como un niño pequ