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—Pero por favor—suspiro y sonrió mostrando una blanca dentadura—no me hagas hablar de trabajo ni nada parecido, este día se suponía que era para poder estar contigo. —El día aún no termina— expresé dudosa de mis propias palabras ¿De verdad quería estar con él después de todo lo que paso? Algo en mi interior me decía que me retractara de haber dicho tal cosa y expresara que me dolía mi cabeza o algo parecido para poder huir de ese horrible intento de cita, pero al ver su mirada y lo atento que parecía estar a mí, no me pude resistir, por muy apenada que estuviese y a pesar de que mi dignidad había quedado sobre suelo, aún quería pasar ese día con él, no dejar pasar la ocasión por culpa de personas ajenas a nosotros. —¿Quieres estar conmigo después de todo lo que pasaste?—frunció el ceño