–No me digas que ya tienes novio –habló Neil –. Le vas a romper el corazón a Henry. –No digas tonterías, yo no le gusto a Henry, ni a nadie –le dije molesta. –¿No te ha invitado a salir? –dudó –. Dijo que lo haría la última vez que almorzamos. –Y yo te dije que le diría que no –le recordé –. Deja de presionarlo para que me invite, no quiero nada con nadie ya te lo dije. –¿Y de quién estabas hablando con la señorita Dubois? –me preguntó. Puse a trabajar a mi pobre cerebro, ahora sí me tenía que funcionar rápido, por favor. –De mi vecino –respondí –. Ahora estoy en un nuevo departamento y mi vecino es su amigo tiene un hijo y Oli se lleva bien con él, por eso me estaba preguntando. –¿Y tú vecino es soltero? –preguntó. –No –contesté. Técnicamente no estaba diciendo una mentir