Sasha volvió a subir las escaleras a su habitación, una extraña mezcla de molestia y júbilo se agitaba dentro de ella. Sus palabras de elogio la hicieron sentir mareada porque durante la mayoría de las prácticas del Equipo Siete, fueron Bott y Marcos los que recibieron toda la atención, dejándola sintiéndose como si estuviera detrás de ellos una vez más. Sin embargo, el líder de su equipo también tenía una forma de meterse bajo su piel y lo había estado haciendo más desde el comienzo de su misión. Probablemente era porque no tenía a nadie más a quien molestar, por lo que ella se vio obligada a soportar la peor parte de sus molestias. Y sin embargo, no pudo evitar sentir que la dinámica entre ellos había cambiado, dejándola sentir tentativamente hasta que pudiera averiguar exactamente dón