Lo había dejado salir, eso era lo que había planeado; aunque no de esa manera. Y aún después de decir esas palabras, aún después de restregarle en la cara y sacar todo ese odio que llevaba acumulando; aún después de todo eso se sentía igual, igual que antes de encontrar a Helen, igual que cuando todo ocurrió, igual que cuando ella murió. Sencillamente nada había cambiado y nada de lo que hiciera la traería de vuelta. Lucas salió de allí dando tumbos, con el corazón más roto que antes y con una mirada perdida y algo de insatisfacción por todo lo que había hecho los últimos meses. En casi un año de conocer a Helen. Clark miraba a su padre sin saber que decir, sus enormes ojos marrones parecían salirse y la corta barba blanca que recién se estaba dejando le daba un toque severo a su ro