POV Madi Un pesado brazo me tiene atrapada entre un duro y caliente pecho y la palma gigante de una mano de dedos largos y finos. Sonrío sin poder contenerme, aún sin abrir mis ojos, porque despertar en la cama de Zeus West, con él pegado a mi espalda y trasero, es el sueño que llevo demasiado tiempo teniendo a todas horas. Me quedo quieta porque no quiero despertarlo, pero cuando intento relajarme contra él, siento algo duro presionando en mi espalda baja, casi en contra mi trasero. El deseo que permanece a pesar de todo lo que hicimos ayer late en mi interior y no hay manera en que yo pueda evitar este subidón que me llega de repente. Las ansias me consumen y mi estómago da un vuelco al pensar en la manera deliciosa que puede iniciar mi mañana si hago las cosas bien. Respiro profun