Lo logré no puedo creerlo he conseguido al hombre que me conviene, es todo lo que siempre quise lo único malo es que le falta la malicia, lo coqueto y lo dominante de Elías, hay que ver si en la cama es igual.
Tengo que resolver ese asunto ¿Será que se dará cuenta? Elías supo que era virgen, pero Carlos no se dio cuenta la última vez que nos vimos.
- Esto no es justo.
- ¿Que no es justo? - me pregunta Julia la chica de servicio y la que sabe mis secretos porque ha estado conmigo desde siempre.
- La vida, tuve la dicha de conocer a dos maravillosos hombres que lo tenían todo para hacerme feliz, pero les faltaba lo más importante. Dinero.
- Señorita siempre le he dicho que le da mucha importancia al dinero y eso no es bueno - estos pobres nunca tienen inspiración - si va a amar debe hacerlo sin importar su estrato social.
- Julia tu con ese pensamiento no llegarás lejos jamás, debes pensar en grande.
- Es cierto señorita, pero los sentimientos también importan. Si no está enamorada del hombre con el que se va a casar por mucho dinero que tenga será infeliz.
- Demetry es un hombre guapo, inteligente y es muy agradable, me hace reír mucho; me hace sentir bonita. Es muy fácil enamorarse de él.
- Pero no lo ama, no la veo tan feliz como lo era con el argentino o el niño de la tienda.
- Carlos y Elías, son mis amores. Uno es el de la infancia, me enseñó el amor, me dio mi primer beso entre otras cosas, pero Elías fue quién me enseñó la pasión, el fuego en la sangre. Si cualquiera de los dos tuviera el prestigio que tiene Demetry serían perfectos.
- Los dos tenían un futuro brillante, Carlos estudio y según dicen compro su propia casa, tiene su carro y le pagan bien en su trabajo.
- Un trabajo que le da mi hermana, ¿qué puede el haber estudiado o cuánto le puede pagar Liah? Nada a comparado a lo que estoy acostumbrada.
- El argentino parecía un hombre de dinero.
- Pero no lo tenía, Elías ese era si hombre para mí, sin embargo, tampoco podía cumplir mis gustos.
- Eso no lo sabe señorita.
- Julia, era un camarero en un cafetín y hacía esencias, aunque dijo que ayudaba a su amiga nada más. No le creo, esos hombres son todo lo q sabrá el diablo en donde; ninguno de los dos estaba a mi altura, ninguno puede darme el estatus social al que yo estoy acostumbrada, ninguno es lo que necesito. Demetry es quien necesito y sé que lo voy a llegar amar.
- Señorita, pero no estuvo bien que se lo quitará a su hermana.
- No le quite nada, simplemente tome algo que ella realmente no aprecia; mi hermana es boba en cuanto hombres se trata. Demetry no es para ella, le estoy haciendo un favor, aunque ella no lo sepa.
- ¿Cómo lo puede saber?
- Porque he aprendido a conocerlos y analizarlos. Demetry es guapo, inteligente, coqueto, pero tiene su toque machista le gusta las mujeres sumisas y tontas, pero voluntariosa.
- ¿Esa no es su hermana?
- Las Meser no somos sumisas mucho menos tonta. Mi papá ya vez como es de dominante, mi tía Miriam es un fosforito y mi tía Cecilia era la más voluntariosa de todas, mi ídolo. Liah y yo no podíamos ser diferentes.
- ¿Por qué se lleva tan mal con ella?
- Porque me molesta que sea tan pesada y manipulable ante mis padres cuando ella no es así. Es una hipócrita eso me molesta, ella debe rebelarse le iría mejor en la vida, tiene potencial para ser exitosa, pero está en este horrible pueblo perdiendo lo mejores años de su vida.
- Admira a su hermana, yo pensé que la odiaba - gente y sus ideas tontas.
- Es mi hermana no la puedo odiar, pero la mayoría del tiempo no me cae bien. Y claro que la admiro - miró a Julia - en tu vida le digas que dije eso - se ríe.
- Está bien, no se lo diré. Pero sería lindo que se lleven bien.
- Si nos lleváramos bien, ella debería dejar el papel de buena hija y revelarse ante mis padres, dejar la hipocresía o yo convertirme en una sumisa. Algo que no va a suceder nunca.
- Creo que la señorita hace una buena pareja con el señor Demetry y no se enojé, pero usted tampoco es como al señor le gustan.
- No, pero una vez casados ya lo convenceré.
- ¿Y si se da cuenta que usted ya no es?... Usted sabe.
- Ya tengo la mentira para eso, y certificada por un médico.
- Me da miedo que algo le salga mal, y lamente después lo que hizo. Usted y yo sabemos que le quitó al señorito a la mala; y que no lo quiere cuando la señorita Liah se le nota que siente algo por él y podía decirse que él también le llamaba la atención.
- Si Demetry la quisiera de verdad no la hubiera cambiado a la primera por mí; no tuve que hacer nada solo salir con él, ser yo misma y listo. Además ¿tú de qué lado estas?
- No estoy de ningún lado, pero si no tiene amigas y se lleva mal con su hermanan y su prima, además no puede hablar abiertamente con su madre solo le quedo yo para aconsejarla.
- Ya no hables más, mejor termina de prepárame la ropa para salir. Hoy voy a ir a la ciudad con mi madre y la tía de Demtry abuscar mi vestido de novia.
- Pero si su tía hace vestidos hermosos – esta se despertó diciendo estupideces el día de hoy.
- ¿Cómo se te ocurre que voy a usar un vestido hecho por mi tía en vez de un diseñador reconocido? Mejor deja de usar esas neuronas que se te daña el cerebro.
Voy a la habitación de Liah esta con llave, ¿desde cuándo Liah echa seguro a su puerta? ¿Qué esconde? Escucho mi celular y es Demetry, su mensaje de buenos días y buenas noches no puede faltar.
“Hola hermosa, te escribo hasta hora porque estaba en el campo con Guille creo que le gusta más este pueblo que lo que le gusta la ciudad ¿Esta lista para ir a la ciudad?”
“Hola, la ciudad es mi lugar favorito, estoy ansiosa por ir. No veo a tu amigo haciendo trabajo del campo”
“Es más útil aquí que allá, estudio lo mismo que Leandro, así que le encanta estar haciendo mezclas; aunque mi hermano tiene más estudios”
“Ya que mencionas a tu hermano ¿le dijiste de nuestra boda? ¿va a venir?” - ¿Cómo será su hermano?, porque este pueblo es más embustero que lo que digan es difícil de creer.
“Le dije que me comprometí, pero no le dije que nos casamos a fin de mes”
“¿Por qué? debes decirle dijiste que tu hermano y tu son inseparables, tu mejor amigo, pero ni le has aclarado que no te vas a casar con Liah sino conmigo”
“Kira, no es porque no quiera, conozco a Leandro; es un gruñón. Ya dio el grito cuando le dije que tenia novia y que me iba a comprometer; imagínate si le digo que cambie de prometida en menos de dos semanas; evita esta boda y no quiero eso…” – yo menos, no hay poder humano que evite que me case contigo – “…quiero que seas mi mujer para toda la vida”
“Así va a hacer, pero ¿lo invitaras a la boda?”
“Por supuesto, un día antes que ocurra o dos, tal vez para que no pueda hacer nada al respecto”
- Kira , ¿ya estas lista? – escucho a mi madre en el pasillo – ¿Por qué demoras tanto?
- Están haciendo mi maleta.
- Para que maletas, niña, vamos a durar el día de hoy y mañana regresamos. Hay mucho que hacer si te quieres casar dentro de tres semanas. No sé porque tanto apuro.
- Porque Demetry así lo desea y yo igual, queremos estar juntos.
- Ahora hay que hacer todo corriendo.
- No es corriendo, nos casaremos cuando el cura y los papeles estén listos.
- Ya vámonos ¿hablaste con tu tía? – no lo hice – Kira dime que le explicaste porque no quieres que ella te haga tu vestido – negué – a veces me provoca darte unos correazos.
- Mamá mi tía debe saber y que yo no iba a mandar hacer mi vestido con ella, es una locura.
- Locura o no ve a hablar con ella, de aquí no nos vamos. Muévete y no te pases de lista porque la voy a llamar a ver si de verdad hablaste con ella, ve que está en la tienda.
Lo que me faltaba, tener que darle explicaciones evidentes a mi tía. ¿Qué cabeza podría pensar que mi tía me haría un vestido tan importante? Igual me voy a la tienda hablar con ella porque conociendo a mi madre no vamos a irnos nunca.
-*-
Entro en la tienda y está la insípida de la hija de Don Juan, Myla.
- Oye – voltea - ¿Dónde está mi tía?
- Buenos días para usted también, nosotros estamos bien, gracias.
- Pasas mucho tiempo con mi hermanita y su prepotente amiga, se te está pegando su sarcasmo. Respóndeme.
- La señora Mirian está en la parte de atrás, en el depósito; ya se la llamo.
- No, yo voy. De aquí a que vayas te pierdes en el camino – me indica el camino y voy.
Cuando logro encontrar la salida tengo una vista exquisita, unos fuertes músculos, un hermoso tatuaje expuestos a la luz del sol.
- Amo esa vista, pero cualquiera la puede ver, no deberías trabajar sin camisa.
- Esos no son comentarios de una mujer comprometida, debería darse su lugar.
- No me hables de esa manera, eres un grosero – ni siquiera me ve – y mírame cuando me hables. – tira unas cajas y se voltea.
- ¿Qué quieres ahora? Estoy ocupado ¿no ves?
- Aun sigues molesto por lo que te dije en la ciudad.
- No, solo recordé cual es mi lugar y cual es el suyo; lo acepté y seguí con mi vida. No quiero que me moleste más, eso es todo.
- No decías eso cuando nos veíamos en la ciudad.
- ¿Cuándo era su juguete para pasar el tiempo y divertirse? – que drama – ya el juego termino, ya busco un juguete nuevo y la felicito.
- Carlos, no podías entender que somos de mundos diferentes.
- Somos del mismo mundo solo que su ego es más grande para poder verlo – que tonto.
- Debes estar feliz de haber estado con una mujer como yo, pero no podíamos hacer más de lo que fuimos.
- Lo entiendo, y me alegra que me haya dicho que un muerto de hambre como yo no puede aspirar a una mujer como usted. Tiene razón, lo ultimo que quiero en mi vida es una mujer como tú; traicionera, mentirosa, manipuladora e interesada - ¿Cómo se atreve?
- Cuida tus palabras, no me hables de esa manera Carlos porque no te lo voy a permitir.
- Mira niña malcriada, aprende que las personas no son un juguete; no quiero que te me acerques, los parias como yo no se mezclan con riquillas sangronas como usted. – pero que orgullo y drama de este hombre – eso fue lo que dijo, entonces haga caso a sus palabras y no se mezcle; siga su camino.
- Carlos, no quiero que lo nuestro termine mal, fueron lindos momentos, fuiste mi primer noviecito, mi primer beso entre otras cosas que no son correctas repetirlas.
- Tampoco debe recordarlas, eran cosas de adolescentes y estúpidos como bien dijo; yo he olvidado esa parte de mi vida y no quiero nada que me lleve a ella de regreso por lo tanto siga su camino.
- ¿No podemos ser buenos amigos? – que orgullo tan tonto – eres un hombre maduro, ese comportamiento es infantil.
- Lamento mucho por usted que crea que una persona que se hace respetar sea infantil, no puedo ni quiero ser su amigo, simplemente quiero que cuando me vea haga de cuenta que no nos conocemos algo que no será nada difícil para usted.
- Estas dolido, pero mira donde estas ¿Cómo podías pensar que dejaría mi vida por esto? – sonríe.
- Se que esta vida no es para ti, no era mi intención que la vivieras. Tu solo vives de las apariencias y el qué dirán por eso no puedes ver más allá de tus intereses; déjame tranquilo. Mejor siga organizando su boda con el niño rico de los Koller, y espero que la ame demasiado y no sea como los de este pueblo que le gusta las mujeres… puras e inocentes. Porque usted y yo sabemos que ya no lo es y no creo que lo pasé por alto como yo lo hice - ¿Qué dijo?
- ¿Cómo te atreves a decir eso? – se ríe con ironía.
- ¿De verdad creíste que no me di cuenta de que no eras doncella? Y uso esas palabras para no irritar y ofender sus oídos tan puros.
- ¡Cállate! No repitas eso. ¿Por qué no dijiste nada? ¿no te molesto?
- ¿A qué hombre no le molesta que le vean la cara de idiota? Pero no soy quien, para juzgarla, cada quien toma sus decisiones, y si estaba conmigo es porque quien haya sido el primero nole respondió como hombre, aunque ahora conociéndola bien, tal vez fue usted quien no lo dejo responder o como viene de la ciudad y es normal que una mujer pase de cama en cama le quedo el gusto. – lo cacheteo.
- Respétame. No me vuelvas hablar de esa manera.
- Usted no se atreva volverme a poner una mano encima – me da la espalda ignorándome.
- ¿Se lo dirás a mi novio o a Liah?
- Soy un caballero, no se preocupe no tengo memoria, pero déjeme en paz.
- Idiota, eso es lo que eres. ¿Dónde está mi tía?
- Acaba de entrar.
Voy a buscar a mi tía y esta con la engreída de Emma que al verme hace una expresión que provoca ahogarla en el lago.
¿Buscas trabajo o se lo quieres quitar a Liah? – me dice
- Ni loca trabajaría aquí. – observo a mi tía – hola, tía, vine hablar contigo a solas – Emma me dobla los ojos y se retira.
- Soy todo oídos ¿Qué te trae por aquí?
- Mamá insistió que te avisará que mi vestido de novia lo comprare en la ciudad o me lo hará un gran diseñador.
- Que atenta de tu madre a que me lo notificaras, pero era de esperarse.
- Eso le dije yo, que tú sabias y entenderías que para un evento como ese no puedo usar un vestido corriente.
- Ya avisaste, ya te fuiste. Tengo mucho trabajo – la miro molesta.
- ¿Me estas echando? Como no soy tu sobrina favorita – todo es Liah.
- No empieces con tonterías, ya vete que tienes cosas que hacer.
¿Qué les pasa a todos hoy que me tratan o me echan de los lugares? Veo a Demetry a lo lejos mientras voy camino a casa, al verme sale corriendo a donde estoy. Trata de darme un beso y retrocede.
- Son comportamientos no apropiados. -se ríe.
-
- Es cierto, lo lamento. – me besa la mano - iba camino a tu casa para despedirlas, te voy a extrañar.
- Solo será un día, mañana volveré a estar aquí.
- Eso espero, cuento los días para hacerte completamente mía; para que solo me pertenezcas a mi y a nadie más.
Llegamos a casa después de una breve caminata por el parque, Demetry nos aviso que ya estaba todo listo para casarnos lo más pronto que se pueda y luego de dos horas de camino estoy en la ciudad, el lugar donde no quiero volver a salir nunca.