Keira
Jamie me alcanzó mientras caminaba a casa después de recibir el mensaje de la mamá de Kevin.
—¡Hey! ¿Estás lista para el primer paso de mi plan esta noche? —preguntó.
—Umm, bueno, mamá llegará tarde... —empecé a decir, pero Jamie hizo un ruido emocionado y me interrumpió.
—¡Eso es perfecto! ¡Podemos comenzar de inmediato!
—Espera, ella dijo que Kevin y yo necesitamos tener una reunión familiar cuando llegue a las 7:30. Así que cualquier cosa que tengas en mente, ¡debes dejarlo! —Me reí sabiendo que ella no lo haría.
—Tenemos tres horas hasta tu reunión, tienes una hora y media hasta que tu hermano llegue a casa, ¡esto es perfecto! Vamos, vamos a tu casa —dijo mientras tiraba de mi mano para llevarme.
Cuando llegamos a mi casa, Jamie me dijo que me tenía que medir porque necesitaba mis medidas correctas para su plan.
—Mira, necesitas confianza, necesitas cambiar. Siempre usas la excusa de que estás gorda y no hay ropa de talla grande linda. Además, dices que necesitas ocultar tu cuerpo. Keira, tu ropa es ridícula, pero conozco un lugar donde puedes conseguir ropa realmente bonita y barata, y tienen una selección de tallas grandes muy linda —dijo Jamie mientras anotaba mis medidas.
—Probablemente haya una trampa. Por lo general, si es barato y bonito, siempre hay una trampa —le dije.
—Bueno, sí, se tardan como dos o tres semanas en enviar la ropa, y no puedes guiarte por la talla, tienes que saber tus medidas. Así que dame los cincuenta dólares —dijo, extendiendo su mano.
Fui a mi escritorio a buscar el dinero.
—Entonces, ¿tú te vas a comprar algo para ponerte? —le pregunté antes de entregárselo.
Jamie se rio y negó con la cabeza.
—Cariño, voy a comprarte al menos cinco conjuntos para esto. Créeme, esta página web es mi secreto para estar fabulosa todos los días.
Jadeé. De ninguna manera podía conseguir ropa de talla grande tan barata y además lucir linda. Además, ¿quién quiere verme con algo lindo? Creía que Jamie estaba perdiendo tiempo y dinero en algo, pero la iba a acompañar.
—Entonces, si crees que este lugar realmente tiene ropa para mí, ¿por qué nunca me has comprado algo para usar antes? —le pregunté.
—En primer lugar, te resistes a comprarte ropa nueva y, en segundo lugar, acaban de abrir una sección nueva llamada tallas grandes y curvas —dijo Jamie.
—¿Realmente crees que lucir algo lindo me quedará bien? —le pregunté. Realmente no quería hacerme ilusiones.
Sé que soy fea. Adam y Kevin me lo han dicho tantas veces. Las chicas gordas no son bonitas.
—Keira, casi tienes dieciocho años, eres una estudiante de último año y es hora de que dejes de menospreciarte. Necesitas este cambio, así que solo confía en mí, ¿de acuerdo? —dijo ella.
—Está bien, confío en ti —le dije suavemente mientras le entregaba el dinero—. Dijiste algo sobre mi pelo, ¿de qué se trata? —quise saber.
—Bien, como dije, esto es un plan de tres partes. Mira, podríamos hacer las tres partes en un día y dejar a todos en shock. Seamos honestas, la única forma en que eso funcione es si te fuiste todo el verano y en tu primer día de regreso ven a la nueva tú después de no verte durante dos meses y medio.
—De acuerdo, lo entiendo —le dije.
—Además, si te haces un cambio de imagen completo hoy y vas así al día siguiente, tú y yo sabemos que serás el blanco del equipo de fútbol. Lo último que queremos es eso —dijo Jamie.
—Tienes razón. —Suspiré.
Una vez, cuando tenía alrededor de quince años, me cortaron el pelo. La mujer que me lo cortó lo dejó demasiado corto. Adam dijo que parecía que había usado un cuenco para cortarme el pelo.
Los idiotas del equipo empezaron a decir que yo era el modelo de la cocina de sopa. Había pasado de que me llamaran sin hogar a chica de la cocina de sopa. Eso duró alrededor de dos meses antes de volver a llamarme sin hogar.
—Así que tenemos que hacer cambios gradualmente, primero necesitas algo nuevo con tu pelo. Es hermoso, pero es el mismo estilo que has tenido durante años —dijo.
—Ya lo intenté una vez, ¿recuerdas? —le dije.
—Sí, bueno, eso fue porque fuiste a algún idiota en una tienda barata que no sabía lo que estaba haciendo. ¿Recuerdas a mi primo Jay?
Asentí con la cabeza recordando el nombre. Jamie siempre estaba diciendo lo fabuloso que era Jay.
—Bueno, él tiene su propio salón de belleza y es maquillador. Es simplemente fabuloso y le encanta hacer cambios de imagen, antes de que digas algo, lo hace gratis. Dijo que le encantaría ser tu nuevo mejor amigo gay y tu hada madrina —dijo Jamie.
—Espera, ¿qué? ¿Estás diciendo que Jay se va a convertir en mi mejor amigo gay? ¿Por qué? —Estaba un poco sorprendida por lo que Jamie acababa de decirme.
—Me escuchaste bien, mira, Jay sabe lo que es ser el centro de burlas y ser acosado. Además, me quiere y quiere ayudar. Confía en mí, hará que tu pelo sea increíble. Serás una Keira completamente nueva. Además, al ser gay, te guiará en el camino correcto para tu nuevo estilo —respondió Jamie, mirándome.
—¿Estás segura de esto? —inquirí y ella asintió con la cabeza.
—Está bien, el imbécil de tu hermano debería llegar en cualquier momento, así que supongo que es hora de que me vaya —dijo Jamie mientras se levantaba de mi cama—. Te va a gustar tener un mejor amigo gay y tu nuevo look que él creará para ti. No te preocupes —agregó.
—¿Quién es gay y qué nuevo look? —preguntó Kevin, entrando en mi habitación.
—¿No llamas antes de entrar? —le dije horrorizada—. ¿Y si me estuviera cambiando de ropa?
—Tranquilízate, hermana gemela, sé que no te cambias de ropa durante el día. —Se rio.
—Entonces, ¿aquí es donde está la fiesta? —preguntó Adam mientras asomaba su cabeza por la puerta—. ¿Desde cuándo socializamos en esta habitación?
—¡Ugh, salgan de mi habitación! No importa quién sea gay y qué nuevo look —les grité y empujé a Kevin fuera de la habitación.
—¿Tú eres gay? —preguntó Adam.
—¡No! ¡Simplemente salgan! —Lo empujé mientras cerraba mi puerta—. Hombre, ¿qué les pasa? —dije a Jamie.
—Son chicos. —Encogió los hombros—. De todos modos, tengo que irme, le enseñaré esto a Jay y él descubrirá tu nuevo cabello. Nos vemos mañana — dijo mientras se dirigía hacia la puerta.