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851 Words
Toc toc toc Espero mordiendo una de mis uñas en la entrada del pequeño departamento. -voy A veces me gustaría tener mi aroma para que sepan que soy yo pero ya no importa. -quién es? Aaa, hola Louis -Hola -pasa, y saca tu dedo de tu boca por dios Pongo mis ojos en blanco -no estoy chupando mi dedo, no soy un niño -como sea, mírate, eres enorme y guapo y tienes un dedo en la boca. La imagen es confusa -vine buscando compañía no a que me hagan bulling Hablo ofendido -que sucede Louis? Mitch se acerca y me da un abrazo, parece un oso, se abalanza sobre mi y me rodea con sus brazos haciendo presión. Yo suspiro y solo me dejo ir. Las lágrimas corren por mis mejillas como ríos. -oh amigo. Por qué lloras? Pasa su mano por mi espalda intentando calmar mi llanto. Pero me alejo un poco de él -discúlpame oh dios Que vergüenza. -siéntate Louis -mejor me voy, no sé a que he venido -no seas idiota Solo lo miro limpiando mis mejillas -sientate, buscaré algo fuerte para tomar -son las 10 de la mañana -pero estás llorando, y si no es temprano para llorar tampoco lo es para beber -eso no tiene sentido -tiene todo el sentido, siéntate El gemelo desaparece y aparece al instante con dos botellas de whisky -estás loco? -hacen falta más de 2 para emborrachar a dos lobos como nosotros Louis ya deja de ser una nenita Me da una de las botellas y veo como destapa la suya y toma directamente del pico. Y bueno, yo hago lo mismo. -aaah -seee -ahora dile a Mitch que te sucede. Solo escúpelo. -esto va a llevar un tiempo Le advierto y él solo asiente bebiendo otro trago. Tomo aire y otro trago y le cuento todo. Desde que vi a Jenna por primera vez escondido en el bosque. -y es agosto nuevamente. Dice el gemelo con lágrimas en sus ojos y las mejillas coloradas. -siempre me pregunté por qué nunca vi tu lobo. No imaginé que seas un alfa, quiero decir. Mirándote físicamente uno sospecha al principio pero luego sin tu olor y al no ver tu lobo blanco, la verdad me has dejado sin palabras amigo. Sabía que el apareamiento alfa era diferente pero nunca se me cruzó por la cabeza tanto dolor. -me siento mal y triste por ti, por todo lo que has pasado. Lamento mucho tu dolor Louis. Estamos en el suelo, las botellas vacías a un lado, Mitch está sentado con su espalda apoyada en la pared y yo acostado con mi cabeza en sus piernas. -Seran 9 este año Mitch. Le digo y se me escapa un pequeño llanto. Con sus dedos acaricia mi cabello. Nos quedamos así un tiempo, solo en silencio. Este consuelo siempre lo encuentro en mi familia, pero estoy cansado y avergonzado con ellos. Hablarlo con una persona nueva se siente diferente. Estoy disfrutando el hecho de haber hablado en voz alta de todo, me siento bien, menos pesado. Toc toc toc -quien es? Mitch pregunta con un pequeño grito -Marco. Louis estás aquí? -si -permiso, que haces hermano? Hace como una hora que estoy esperando con la comida lista. Mamá prácticamente me amenazó para que te cocine hoy -disculpa, no era necesario que lo hagas. -si lo era. Lo sabes. -vamos a comer Louis. -tu no estas invitado Marco le dice con cara de asco -acabamos de emborracharnos y llorar durante horas comeré tu comida te guste o no niño -aquí el niño eres tu Mitch. Respetame. -tu entraste a mi casa con esa cara agria que tienes. Yo voy a comer tu comida. -que preparaste Marco? Pregunto para que dejen de discutir. -carne al horno con vegetales. -genial. Vamos. Salimos los 3 de casa de Mitch y vamos sin frenos hasta la casa principal. Allí están papá y mis hermanas y mis sobrinos. -Louis hijo, donde estabas? -este salvaje estaba emborrachandolo Amara y Samanta se ríen y Mitch agradece como si le estuvieran dando un premio. Marco sirve la comida de todos y comemos. -cómo estás hoy hijo? -bien. -estás borracho tío? -no -pero estabas en una fiesta? En las fiestas hay alcohol, por qué no nos llevaron? Debe ser divertida una fiesta por la mañana. Había globos? -en unos años más el tío Mitch los llevará de fiesta todas las semanas Choca los 5 con mis dos sobrinos de 6 y 11 años. Marco solo hace ruiditos de oposición a lo que el gemelo acaba de decir y papá se ríe -tu no vas a llevar de fiesta a mis hijos Dice Amara riéndose -por qué no? Me adoran y soy muy bueno, confiable y lindo. No Louis? -si, eres un gran amigo. Termino de comer, lo poco que pude hoy y me pongo de pie. -permiso, tengo que terminar unos documentos. Me voy antes de nadie pueda decirme algo.
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