—¿Qué tiene esa chica de importante, Marcos? Puedes conseguirte a una mejor, tendrás mucho dinero.
Marcos lo empujó.
—¡Quiero a Luna! Quiero quedarme con ella —sentenció.
Adolfo lanzó un suspiro.
—Si eso quieres, voy a ayudarte.
Marcos sonriò satisfecho.
***
Luna estaba desesperada, estaba junto a Mayte.
—¿Cómo saben que Elio iba en ese avión? ¿Cómo saben que está muerto? ¿Quiero ver su cuerpo? ¡Hasta que no lo vea, no creeré en su muerte! —sentenció Luna
—¡Está muerto, Luna! Debes entenderlo de una buena vez, Elio se ha ido, no va a volver —dijo Marcos.
Luna tenía ojos cubiertos de lágrimas y abofeteó su rostro con rabia.
—¿Estás feliz con su muerte, Marcos? Eres un hombre malo, nadie puede amarte.
Marcos la mirò con furia, Luna se alejó y cuando èl quiso ir tras ella, Mayte
