Kathy El ruido de las personas a mi alrededor parece aumentar cada vez un poco más, cierro los ojos y los abro para encontrarme con un grupo de niños, mi cuerpo gira mirando hacia todos lados, observando cada uno de los pequeños que se encuentran cerca, en el tobogán, el pasamanos, los columpios, hasta que la veo. Su cabello rubio está recogido en una coleta alta, desde esta distancia sus cejas no se pueden ver, lo único que resalta son aquellos dos faroles celestes que ahora miran con dulzura a un grupo de pequeños, se ríe como tantas otras veces, mi vista se distorsiona, apenas logro bien, solo la diferencio un poco. Llevo mis manos hasta mis mejillas, la humedad las recibe, están mojadas, estoy llorando, las lágrimas por mi mejilla despacio marcando el dolor que ahora se remolina en