-Ayumu. - escuchó una voz demasiada conocida y masculina, la cual le causó escalofríos.- ¿Qué haces aquí?
-Me invitaron a ver un partido. - sonrío hipócritamente.
-Este año también ganaremos.
-mmm… no lo creo, ¿sabes? Cada día somos más fuertes.
-Tu hermano y tú debieron estudiar en el Washizato conmigo.
-¿Enserio eres tan acosador?- dijo un chico castaño apareciendo de la nada.- ¿ahora también acosas a las chicas lindas? Debería llamar a la policía.
-Oliver. - lo vio Uaid. - Tu también debiste venir al Washizato.
-¡YA TE DIJE QUE ME DEJES EN PAZ!
-¿Ya te acosó por mensajes?
-¡FUE A MI CASA!- se quejó viéndola con miedo.- Sé que soy guapo pero no me gustan los chicos.- Oliver se acercó a la chica sonriente.- Pero si me acosas tu no hay problema.
-Ya tengo demasiados chicos detrás de mí. - sonrió apenada. -no quiero más, por ahora.
-Yo no soy solo un chico. - Oliver la tomó del mentón coqueándole y causándole un sonrojo. - Podría algún día enseñarte a jugar voleibol.
-Oliver. - llamó Uaid causando un suspiro molesto del mencionado. -Ella juega voleibol al igual que sus hermanos, y es una maravillosa manager por eso debió ir a Washizato con su hermano. La mejor escuela necesita a las mejores personas.
-¿Cuál de los dos? -molestó Ayumu a pesar de saber que uno de sus hermanos solía tener una pequeña rivalidad con todo ser viviente.
No, no era rivalidad.
Simplemente Susumu no era la persona favorita de algunas personas.
-El que no es armador.
-Tal vez podemos hacer un juego amistoso con ellos. - sonrió Oliver sacando una tarjeta con su número. -llámame para ponernos de acuerdo linda.
-S-si.
Uaid miraba mal a Oliver por ponerse tan coqueto con la chica que le gustaba. El coqueteo de Oliver era sutil pero notorio ¿Qué chica no quedaría encantada ante él? Era capaz de mandarle el mensaje adecuado a Ayumu sin ser considerado un acosador, cosa que le faltaba a Uaid.
Estaba celoso y eso era obvio, pero le molestaba más el hecho que no podía hacer nada.
-Ahora linda. -sonrió Oliver notando la mirada de su rival. -Tengo que hablar con este chico, ¿te parece bien dejarnos solos?
-¡Claro!- dijo alegre la chica escapándose del lugar y corriendo hacía las gradas.
El partido ya iba a comenzar y ver a Uaid solo le hizo pasar un mal rato.
Sabía que Uaid gustaba de ella.
Incluso intentó acercarse a él y ser linda con él, el chico era guapo y parecía ser educado con todos. Pero todo fue malo cuando comenzó con su "Debiste ir al Washizato", ¿en qué momento la conversación para intentar conocerse pasaba a porque debía de asistir a esa escuela?
Una parte de ella se sentía mal, sentía que lo había estado tratando feo todo este tiempo mientras que él era lindo y amable claro, cuando no hablaba de su escuela.
Simplemente no se sentía cómoda con él y no planeaba estar donde no se sintiera cómoda.