Las imágenes del video interrumpieron múltiples veces mis sueños, pero lo que Tabita no habia pensado es que Keres iba a tomar venganza, porque gracias a ese árbol ella salio a la luz y ahora la oscuridad que tenía clamaba venganza. Esa parte quería vengar a su árbol porque nunca mereció estar en ese vacío oscuro y morir ahí, pues sabia lo cruel y frío que era ese mundo, para ella ese árbol era su salvación y su salvación merecía justicia.
—Y aunque el árbol estaba en paz, la nueva vida se asegurara de que siga asi.
—¿Qué dices?.
—¿Qué cuantos libros me faltan?.
—50.
—¿¡Solo hice 50!?.
—Sí, deberías de descansar, podemos cambiar la fecha del lanzamiento.
—No, estoy bien.
—¿Sabes algo de él?— me pregunta Mila
—No.
—Ha tratado de venir varias veces.
—Ya se cansará.
—Keres estoy preocupada por ti.
—¿Por qué?.
—Te rompió el corazón.— me mira —A ti la que no cree en el amor.
—Sigo sin creer, mucho menos ahora.
—¿Cómo te sientes?.
—Bien.
—De verdad,
—Me siento bien.
—Keres— dice un tono bajo
—Me siento bien, porque me recordó lo poco que me gusta parecer frágil, me siento bien porque logre que perdiera millones, me siento bien porque me amo y se que me merezco una vida mejor.
Me limpio las lágrimas.
—Pero asi como me siento bien, me siento mal, porque me gusta, porque se siente como un hogar, porque me engaño y aunque el tambien fue una víctima, me agredió, me siento mal porque quería decirle todo, a donde fui, con quien estuve y en vez de protegerme me agredió.
—Entonces dile, dile todo ¿Cuándo dejas que alguien te humille? ¿Cuándo dejas que alguien lastime a quien quieres?.
—Nunca.
—¡Exacto nunca!.— toma mi pincel de la mano —Keres Thompson no deja que nadie le quiten a quien quiere y mucho menos deja pasar una venganza.
—¿Y los libros?.
—Motivada trabajas el doble, los libros estarán listos.
Agarro mi bolso y voy corriendo a mi auto, me veo como un desastre, un peinado sujeto por dos pinceles, los dedos pintados y mas, horrible me miro, pero es verdad, soy egoísta y me gusta ganar, mas si tengo sentimientos por algo.
Toco el claxon cuando entro a su casa tratando de llamar su atención, dejo el carro estacionado frente a la puerta y les lanzo las llaves a los de seguridad. Entro y Michelle viene bajando las escaleras muy rápido.
—¿A dónde crees que vas?.
—Que te importa.
—Soy la señora de la casa…
—Me importa una mierda.
Le cierro la puerta en la cara mientras entro al despacho, Elijah se pone de pie inmediatamente y camina fuera del escritorio.
—¿Paso algo? ¿Te sientes mal?.
—¿Resulto cierto lo del incienso?.
—Sí.— dice con la cabeza baja —Es cierto.
—¿Por qué siguen aquí?.
—Porque el que carga en su vientre es mi hijo.
—Denúncialas.
—No puedo, soy un hombre Keres nadie va a creerme.
—Oye tambien hay mujeres que hacen daño y lastiman.
—No puedo ¿Por qué estás aquí?.
Keres no te acobardes tú puedes, donde está tu motivación de hace unos segundos.
—Keres me estás asustando.
—Tengo que decirte algo, pero ¿Lo digo?.
—Dilo.
—No soy muy buena para esas cosas, pero lo intentare— me acerco a él —¿Qué harías por Ana?.
—Keres.
—Solo dime, lo necesito para poder hablar, ya estoy muy nerviosa y mírame soy un desastre ¿Quieres que me vea peor si no me contestas?.
—La vengaría, Keres estas…
—Ana está muerta, pero descubrí cosas Elijah— tomo sus manos —Descubrí cosas y me provocan muchas ganas de vengarla, déjame vengarla, déjame vengarte.
Sus ojos se vuelven cristalinos y su agarre se aprieta.
—Odio que lastimen a los que amo, a los que me importan y sinceramente tú me importas, mucho, me jode lo que me hiciste, pero quiero venganza.
—Entonces— me mira —¿Cómo te ayudo a vengarte?.
En cuanto escucho esas dulces palabras me suelto y lo abrazo, él me abraza con ganas, muchas ganas, mierda es tan sexi.
—Esta es la mejor declaración de amor que me han hecho.— dice feliz
—Esta no es una declaración de amor, es una declaración de venganza.
—Voy a hacer que te creo.— me da un beso en la frente —¿Cuéntame tal descubrimiento?.
—Violeta, Cristal y Michelle, una está muerta, pero las otras dos están vivas.
—Nunca te dije su nombre.
—Violeta estaba enterada de tu amor por Ana, cuando se enteró de que la compraste, ella habló con Cristal.
—Es imposible, desde que tome el control estuvo encerrada en el sótano.
—Entonces sabrás que tenía o tiene gente que hacía lo que ella pidiera.
—¿Cómo es que sabes eso?.
—Shh escúchame— le digo —Tú pagaste ocho punto cinco millones para tenerla, para salvarla y ella le dio ocho punto cinco millones por desaparecerla y condenarla, el día de la playa se efectuó todo, las pruebas las planearon bien, eran tan reales, mira esto.
Saco mi celular y le muestro la grabación, su cara cambia cuando mira como escarban, como hacen todo conforme el plan, el video se corta y aparece donde Michelle me disparo.
—Siempre pensé que Cristal disparo, pero jamás pensé que fue Michelle.
—¿Dónde conseguiste este video?.
—Fue un regalo de cumpleaños.— le digo —El de Ana, llego a mi puerta el día que salí del hospital.
—Fue tu cumpleaños.
—El de Ana, Elijah ¿Ahora entiendes mi sed de venganza?.
—La mayoría murió en ese atentado excepto uno— me dice —El único que quedaba está muerto, es él…
—El que intento matarme con Xinei.— termino por él —Entonces solo quedan dos, madre e hija.
—Mierda.— dice alguien
—Eras Ana— dice otro al mismo tiempo.
Volteo y miro a Jason y Alex.
—¿Por qué no me dijiste que estabas acompañado?.
—Las cosas pasaron muy rápido.— me contesta
—Está de más decirles que no dirán nada de lo que escucharon.— les digo
—Tengo algunas dudas, ¿Cómo sabías que hice una prueba de ADN?— dice Jason
—¡Me hiciste una prueba!.
—¡Le hiciste una prueba!— decimos al mismo tiempo
—Sí, entonces ¿cómo? Porque salio negativo es claro que sabías.
—¿Tú crees que me interesa lo que hagas? Tengo sangre Thompson.
—Pero…
—Ustedes ya se iban— les dice Elijah
—No, imposible tengo muchas dudas.
Alex lo saca a rastras de la oficina y Michelle intenta entrar, pero gracias a mis habilidades le vuelvo a cerrar la puerta en su cara y con llave, soy la mejor joder.
—Puedes matarlas, pero después que nazca mi hijo.
—¿Estás seguro de que lo quieres tener?.
—Ya no se puede hacer nada, un aborto es imposible para la cantidad de semanas que tiene.
—Se esperó para que no pudieras hacer eso y los hijos terminan sufriendo por los padres.
—Yo no quiero eso Keres, dije que no quería ser como mi padre y no pienso serlo, no merece una vida de mierda solo porque fue concebido por…
—Una violación, está bien decirlo, eso fue lo que te paso y es horrible, me asegurare de vengarte.
—Y yo de vengarte a ti.
—¿Quieres ir a terapia?.
—No, no, es humillante decir que me drogaron y no.
—Ayuda mucho hablar, son profesionistas no te juzgarán ni nada.
—¿Tú has ido?.
—Si claro.
—¿Cómo fue?.
—Duro— me siento en sus piernas —Porque tienes que aceptar de que fuiste herida, que te lastimaron y que está bien tener miedo, es difícil abrirte a la persona, pero de alguna manera funciona y te aligera el alma.
—¿Si me armo de valor me acompañarías?.
—Siempre.