Capítulo 8

984 Words
Punto de vista de Winter Dios, mi cabeza está palpitando como no puedes imaginar. Me obligo a abrir los ojos, mi garganta se siente dolorida y completamente seca mientras lamo mis labios agrietados, confundida y desorientada. Me pregunté dónde estaba, mirando alrededor de la habitación, dándome cuenta de que era mía. Pero ¿cómo había llegado aquí? Recuerdo claramente que mi padre me golpeó en la cabeza abajo y luego nada. Estaba segura de haber perdido el conocimiento por el dolor en la cabeza. ¿Entonces quién me había acostado en la cama? Dudaba que fuera mi padre, pero también era sorprendente pensar que mi hermano Damien tendría tanto cuidado de mí. Pero él era el único que posiblemente pudiera haberlo hecho y siento un pequeño agradecimiento hacia él. Me obligo a levantarme de la cama, parpadeando contra la luz brillante del sol e intentando no gritar por el dolor en la cabeza. Siento la parte posterior de mi cabello y puedo decir que está enredado con sangre seca y gimo, me llevará mucho tiempo quitarlo todo y espero no tener que hacer algo horrible como cortarlo. Me ha llevado mucho tiempo dejarlo crecer hasta esta longitud. Me apresuro al baño y estoy extasiada al descubrir que puedo lavarlo con un poco de esfuerzo, mi mano ahora completamente curada junto con mi lesión en la cabeza. Son las pequeñas cosas de la vida, pienso amargamente, por las que debo estar agradecida. Me tomo mi tiempo y camino de puntillas hacia abajo, disgustada por el desorden que me recibe. Hay platos apilados en todas partes y docenas de botellas de cerveza vacías dispersas por el suelo de la sala. Afortunadamente, mi padre está roncando ruidosamente en la silla, posiblemente todavía borracho a juzgar por su olor, y aprovecho la oportunidad para preparar el desayuno y ponerlo en la mesa. No hay forma de que lo despierte y enfrente su ira cuando tengo que ir a la escuela. Por primera vez, casi inhalo mi sándwich de tocino y huevo, sin señales de mi hermano en ningún lado y asumo que ya se fue a la escuela. Bueno deshacerse de él, no podría haber estado más feliz esta mañana. Dejo su desayuno fuera por si acaso y agarro mi mochila escolar. Hasta ahora ha sido una mañana tranquila y parte de mí se siente esperanzada de que continúe, caminando hacia la escuela sin interrupción de nadie por primera vez en meses y no puedo creer mi buena fortuna. ¿Qué está pasando? ¿Me ha tenido piedad la diosa lunar? Un grupo de animadoras se reúne en el pasillo y instintivamente bajo la cabeza e intento cubrirla con mi largo cabello mientras paso junto a todas ellas. Puedo escuchar claramente su conversación y, para mi sorpresa, nadie me nota mientras paso. Demasiado ocupadas con su conversación o posiblemente con chismes. Lo que sea, mientras no tenga nada que ver conmigo, me importa poco. -¿Puedes creer que hay un chico nuevo en la escuela hoy?- -Eso no es todo, ¿adivinen qué?- -He oído que él es un Alfa-, dice Jessica y me estremezco, todavía intentando pasar sin ser atrapada. La veo tirando su cabello sobre su hombro, una sonrisa enorme en su rostro. -Sé con certeza que él va a ser mi pareja, es obvio-, casi ronronea mientras sus amigas parecen un poco molestas. Problemas en el paraíso, pienso orgullosamente. Parece que también sus amigas quieren a este pobre chico Alfa. -¿Y si no lo es?- otra se atreve a cuestionarla y se queda en silencio ante la mirada amenazadora en su rostro. -De todas formas me querrá-, dice ella con suficiencia, -después de todo, soy la chica más hermosa de la escuela. No siempre tenemos que estar de acuerdo para ser parejas, podemos elegir marcarnos mutuamente-. Casi me burlo de su blanca muestra de confianza. Las parejas están destinadas a estar juntas para siempre y me pregunto por qué ella piensa que solo ser hermosa será suficiente para atraer su interés. ¿Realmente los hombres licántropos son tan superficiales? Bueno, ella puede quedárselo. Dudo que con mi apariencia siquiera me mire y eso está perfectamente bien para mí. Prefiero ser invisible en lugar de que me presten atención. Las otras chicas comienzan a conversar emocionadamente entre ellas y llego a mi casillero sin incidentes, agarrando los libros que necesito. Mi corazón se hunde un poco. Con lo que sucedió anoche, no pude completar mi tarea y temo lo que el profesor pueda decir. No fue exactamente mi culpa, pero aún así duele. Odio decepcionar a mis profesores. A menos que esté fuera de mi control, como anoche cuando estaba inconsciente, entrego mi tarea todos los días sin falta, y sé que mis calificaciones podrían verse afectadas y todo por lo que mi padre me hizo anoche. Maldito sea, pienso amargamente mientras comienzo a dirigirme a mi clase de álgebra, sintiéndome enojada y llena de odio hacia el hombre que ya no es un padre real para mí. Espero que la tarea, o mas bien la falta de ella, no afecte mis calificaciones de ninguna manera. Si es necesario, ofreceré hacer trabajo extra para compensarlo. Me niego a dejar que mis calificaciones fracasen cuando las necesito para la universidad. Me encuentro preguntándome sobre este supuesto chico nuevo que tiene a todos tan emocionados. Como si nunca hubiéramos visto a un Alfa antes. Aunque, no había otros Alfas en esta escuela. La mayoría tienden a ir a escuelas privadas en lugar de públicas, supongo que debido a su estatus como líderes de sus manadas. ¿Será este Alfa amable o será como el resto de la escuela y me atormentará junto con ellos? ¿O se alejará de mí? Porque ser acosada por cambia formas regulares es malo, realmente no quiero descubrir cuánto peor puede ser el acoso cuando un Alfa decide unirse también.
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