Capítulo 52
El hombre bueno y la mamá astuta
Lucrecia jamás se imaginó que hacerle esa llamada a la mujer en quien más confiaba la haría sentir tan avergonzada e impotente; por otro lado, La reina Lucía con su hija suele ser una mujer muy paciente y permisiva, pero es muy consciente de que en este momento no podía permitir que Lucrecia hiciera lo que deseaba o retrasara el asunto, desde que leyó la primera página del perfil de Sebastián supo que se podía confiar en él, y en seguida creo el plan perfecto para lidiar con su marido; pero, las divagaciones de su hija solo retrasarían su plan, a sabiendas de que es precisamente ella quien saldrá perjudicada en el futuro si se toman este asunto con calma.
Lucía de Northumbria además de cumplir a cabalidad con sus responsabilidades como Reina
