Capítulo 109
Indirectamente culpable
Inmediatamente un par de soldados de la guardia real de Northumbria, aparecieron detrás del Duque y cada uno lo tomó por un brazo, sin darle oportunidad de moverse de nuevo.
La princesa Lucrecia después de un par de respiraciones profundas para calmarse, pensó
‘¿A que le temes Lucrecia? Ya no eres una princesa enviada sola al extranjero con una excusa económica para darle oportunidad al Duque de atraparte, ahora eres una mujer casada y debes dejar todos esos traumas en el pasado’
Con eso en mente, se puso de píe, en realidad mirando bien al hombre siendo sostenido por los guardias delante de ella, pudo decir que desperdició todo ese tiempo que le tuvo terror; sin su escolta, no es más que un pobre hombre vicioso y cruel…
Salió de detrás de la es
