Marco planeaba una venganza sutil, dolorosa y por sobre todo; desconsiderada.
Pero… aquel juego premeditado pronto se le vendría en contra.
Frío, despiadado y cínico, está dispuesto a dañar todo a su paso con tal de conseguir su tan ansiada vendetta; sin siquiera reparar en las consecuencias.
Sin escuchar consejos, decidió que haría pagar la traición de Vanessa de la peor forma: usando a la mejor amiga de ésta como cebo.
“La venganza es un arma de doble filo, cuando la llevas a cabo te envenena el corazón”.