El verano que conoci a Alex

Capitulo 3

En el reloj del bar eran casi las 11 cuando la chica finalmente llego. Me senti la persona mas feliz y no sabia porque. Aunque viendola ahora, sin las copas de mas, era bastante linda. ¡Pero que me esta pasando! Acaso me estaba fijando en una chica? Siempre me considere heterosexual, que esta pasando!? Aun asi...  ¿que podria pasar? Dije que vendria y haria aqui todo lo que quiciera porque esta semana no hay reglas.

La observe mientras se sentaba en la barra, era alta y delgada, blanca, por lo que supongo que no lleva mucho desde que llego, tiene el cabello largo,n***o y ondulado. Su cara es hermosa y es muy sexy. Llevaba un vestido n***o y unos tacos que hacian que cualquiera babeara por ella.

No puedo creer que esto este pasando, quiero ir, necesito ir con ella, con la chica que me ayudo ayer que no tengo ni la mas minima idea de como se llama. Pero, como me acerco? No puedo llegar solo asi... necesito una buena razon, si no, quedare como una gran tonta.

Despues de varios minutos de pensarlo bien  tome valor y me levante de la mesa para ir con ella, mis amigas ya estaban un poco pasadas asi que ni siquiera notaron mi ausencia.

– Hola-  le dije sonriendo, hasta la voz me temblaba - oye, queria agradecerte muchisimo lo de ayer. Por cierto soy Dana, mucho gusto.

- No fue nada, a mi tambien me ha pasado y siempre llega alguien que ayuda. Soy Alex... dime Dana que hacian 3 chicas bebiendo como locas, si al parecer no tienen nada de experiencia en esto?

– Amm... nunca habiamos tomado, pero decidimos que hariamos lo que quicieramos estas vacaciones sin importar las concecuencias- me senti como una tonta al expicarlo.

– Suena bastante divertido, y dime... que ha sido lo que tu haz hecho este tiempo. -Pregunto levantando una ceja, haciendola lucir aun mas sexy.

– Hasta ahora, solo ponerme tan mal como me viste ayer- dije poniendome roja.

– Solo eso? Ningun romance secreto o algo parecido?

– Nada, supongo que no podria.

– claro que podrias- dijo mirandome tan seductoramente que cualquier chico habria caido a sus pies en ese mismo momento.

– Ademas... no veo a nadie con quien me gustaria intentarlo- menti y creo que hasta ella lo noto.

– ah, no? Y dime, que pensarias de una linda chica sentada frente a ti, lanzandote sus mas poderosas miradas, intentando provocarte?- levanto ambas cejas y se acomodo el cabello.  No  puedo creer lo que esta pasando.

– A caso quieres decir que...- no me dejo terminar, inclino su cuerpo hacia adelante y me beso, tan salvajemente que apenas y podia respirar. Me llevo un par de segundos asimilar lo que estaba pasando y con eso, alcance a ver la cara de sorpresa del chico que atendia en la barra. Cuando termino, volvió a lanzarme una de sus miradas y me dijo "vamos afuera".