Abigail no se cambiaba por nadie. Se levantó muy temprano y después de arreglarse salió para la empresa. Tendrían la oportunidad de salir adelante con su empresa. Si Eliam la buscaba para que realizara el proyecto de decoración era porque tenía confianza en ellos. Era mejor pensar en eso que creer que él estaba entusiasmado con ella. Respiro profundamente para controlar toda la emoción que sentía en su pecho. Era lunes, y muy temprano llego Manuel desesperado por saber cómo le había ido en la cita. Él no podía disimular su estado de nervios por conseguir el chisme de última hora. -Querida, ¿Cómo te fue?- le preocupaba como hubiera pasado la noche. Además quería saber quién era Eliam en la vida de la joven. -¡Bien! - la sonrisa hablaba más que las mismas palabras. Los ojos d