Melody solo lloró por un par de minutos seguidos antes de calmarse al ver a la mujer frente a ella.
Tan dolorosamente delgada.
Tan maltratada, avejentada y seca su piel casi marchita por completo.
Y que decir de su cabello!
Está completamente seco, sin vida, quebradizo...
Un completo desastre!
Y su ropa!
Dios santo!
Que mujer se pone esos leggins tan grandes de color verde y esa blusa anticuada y deslavada de color naranja!
Y para rematar ese sueter pasado de moda de color uva!
"Basta ya Melody."
Jazmín la consuela lo mejor que puede porque en verdad que el nivel de negligencia en el cuerpo de la pequeña mujer es...
Escalofriante.
"Ella es la nueva ayudante de Pastor y Bishop, por lo cual tenemos que dejarla..."
Ambas miran a la pobre mujer quien vuelve a colocarse la bolsa sobre su huesudo hombro.
Dios.
Ellas no saben como es que ella no se rompe en dos al cargar la bolsa que les parece pesada en verdad.
"Medianamente presentable."
Melody está de acuerdo.
"De cuanto tiempo dispongo?"
Cuestiona la bella chica quien parece una modelo Pin Up de los años cincuenta.
El cabello rojo largo y adorablemente arreglado en ondas largas atadas detrás de su espalda con un lazo de color verde claro.
El pequeño flequillo a media frente perfectamente peinado y arreglado hace que sobresalga su piel pálida.
Y que decir de sus ojos bien delineados,
pestañas largas oscuras y rizadas,
sus pómulos bien definidos
y su boca delineada con un tono de labios rojo pasión intenso!
Melody lleva una pequeña blusa de color rosa con adornos de flores al frente y unos leggins pegados a sus torneadas piernas de color azul los cuales solo cubren la mitad de su palida pantorrilla.
Pero lo que más llamó la atención de la mujer fueron los hermosas zapatillas rojas de tacón de Melody!
La chica se ve hermosa, pero palidece ante la belleza natural de Jazmín.
"Solo haz lo mejor que puedas con diez minutos y contando en retroceso."
Comenta mirando el delicado reloj en su muñeca Jazmín.
"Me pides que haga magia!"
"Eso es tan injusto!"
Jazmín deja caer su precioso trasero en la silla frente al enorme espejo para comenzar a arreglarse sola.
"Bien, veré que puedo hacer."
Pasando al lado de la mujer, después de darle un muy breve vistazo a su casi inexistente cuerpo, Melody decide ponerle algo que la cubra por completo.
"Entra en este cambiador."
Melody le indica la mujer, a la que nadie se ha molestado en preguntarle su nombre, que entre dentro de un cubículo cerrado con una puerta de color rosado.
La mujer entra en el cubículo que está rodeado de espejos de cuerpo entero.
La pesadilla de la mujer quien nunca se miraba en el espejo más pequeño que podía encontrar en casa.
O en el baño de la inmunda fábrica donde solía trabajar y a la cual había dado su vida entera.
Su vida entera!
En fin, ella nunca se miraba más de dos segundos completos pues sabe que ella es poco agraciada.
O más bien, fea para acabar rápido.
Y ahora lo comprueba al mirarse sin reparo en el espejo.
A donde se había su juventud entera?
Su piel bella y rosada?
Por primera vez en muchos años, la mujer se miró al espejo...
Y sintió una terrible lástima por ella misma.
Al estar tan concentrada en cuidar a sus enfermos padres, la mujer nunca pudo cuidar de ella misma.
A duras penas podía conseguir darse una ducha decente con agua tibia y un poco de jabón pues su madre o padre necesitaban de su ayuda constante cuando estaba en casa.
Pero ahora...
Ahora ella estaba sola por completo.
Sola en el mundo.
"Quítate esa ropa y dejala en el suelo."
"Toda la ropa, de acuerdo?"
La mujer cerró los ojos cuando comenzó a hacer lo que le decía Melody.
"Te pasaré por abajo tu ropa."
"Espero te quede!"
Melody ruega porque la talla más chica que tiene de ropa en el extenso armario que ella maneja le quede al paupérrimo cuerpo de la mujer dentro del cubículo.
La mujer casi puede llorar al sentir la suavidad de las telas en la ropa!
Ella nunca pudo usar algo lindo, suave o nuevo!
Pero ahora...
"Es tan hermoso!"
La mujer no puede evitar exclamar cuando siente sobre su piel el vestido largo de color blanco ajustado a su pecho escaso.
Tiene un falda larga con estampado de rosas rosadas, con mangas largas en conjunto con un cuello alto!
La tela...
Es tan suave, nueva y perfumada!
Además, la ropa interior nueva y de encaje se siente tan agradable contra su piel!
La pobre mujer siempre habia soñado con usar ropa interior de encaje.
"Ahora, si ya estás lista, toma toda tu ropa vieja en tus manos."
Indica Melody para que la mujer se de prisa.
Cuando sale la mujer del cubículo, las dos chicas sonríen al ver el enorme cambio.
Si...
La ropa adecuada puede hacer maravillas.
"Por favor, tira tu ropa vieja y tus gastadas sandalias en este bote de basura."
La mujer siente pena al tirar su única muda de ropa informal que tuvo durante tres años, pero lo hace.
Cuando sus pies descalzos sienten la afelpada alfombra del salón de belleza de Melody, la mujer deja escapar un gemido de felicidad!
"Entra al baño conmigo por favor."
Melody indica y la mujer camina hacia el lugar con ella.
"Te lavarás la cara con esta espuma aclarante y tus pies con este jabón especial."
La hermosa chica le entrega a la mujer las cosas en su mano.
"Esta es el agua fría y el agua caliente."
Melody indica las llaves del bello lavabo de color rosado con dibujos de rosas y aves hermosas.
"Date prisa."
La mujer hace lo que le pide la chica de la forma más rápida que puede.
"Bien, ahora siéntate aquí."
Le indica Melody a la mujer.
Ella ocupa la bella, cómoda, blanca y afelpada silla alta frente a un espejo lleno de pequeñas lucecitas.
"Vere que puedo hacer por ti."
Mientras Melody trabaja untando cremas, correctores, bases, cremas sobre la cara tan maltratada de la mujer...
Espera, necesita más corrector cosmético.
Algo de color, no mejor no...
Bueno si, pero en los labios este color no...
Ay no, ese color no le queda bien a los labios delgadísimos de la mujer!
Ay que dilema!
En verdad que Melody nunca antes había tenido una mujer en sus manos tan difícil de maquillar y arreglar!
Un reto.
Si, eso es!
Un total reto a la capacidad de Melody como estilista profesional entrenada y bien pagada es dejar presentable a la mujer.
"OH DIOS MIO!"
Exclama Jazmín cuando ve a la mujer quien parece unos pocos años más joven arreglada y maquillada de ese modo.
El cabello ralo, quebradizo, sin vida, como si fuera paja sobre la cabeza de la mujer fue amarrado en un moño apretado para después cubrirlo con una peluca de cabello natural hasta los hombros de color chocolate claro.
Por lo que ahora, vestida y arreglada de esa forma, la mujer parece...
Una muñeca vieja.
Pero al menos no es una muñeca aterradora.
"Bueno, es lo mejor que pude hacer con tan poco tiempo."
Exclama Melody mirando a la mujer quien se mira incrédula en el espejo.
La mujer no puede creer que ese sea su reflejo!
Ella nunca pudo costearse maquillaje alguno, ni siquiera bálsamo para sus labios partidos...
Y ahora ella tiene sobre los labios un color vino oscuro que los realza solo un poco.
Además tiene pestañas postizas, cejas un poco definidas y sus manchas en la piel fueron cubiertas por el maquillaje!
"Es maravilloso!"
La mujer exclama encantada y sonriente al verse al espejo.
"Muy bien cenicienta, ahora tus zapatos."
Jazmín le entrega unos zapatos divinos de color rosado, con medio tacón y cerrados, pero extrañamente bastante cómodos.
La bella Jazmín tiene un don para conocer el número de calzado de cada persona que ve.
Y vuelve a acertar cuando la mujer se coloca los zapatos exclamando que son de su talla!
"Perfecto!"
"En tiempo perfecto quedaste arreglada porque debemos ponernos en marcha!"
"Pastor esta a punto de..."
Justo en el momento en que Jazmín iba a decir que Pastor estaba a punto de gritar, la voz del hombre se le adelanto.
"JAZMÍN!"
"Es hora de arreglarse!"
Melody carga su bolso en su hombro y su cosmetiquera de mano.
"Oh mi bolsa!"
Exclama la mujer intentando regresar por ese crimen de la moda que se habia quedado tirado en el bello y limpio piso del salón de belleza.
"Déjala ahí."
"Nadie se la robará, puedo garantizártelo."
Melody indica a la mujer mientras cierra la puerta de cristal con diseños de rosas y aves para ir a arreglar a sus chicas.
"De acuerdo."
La mujer suspira dejando atrás lo único que le queda de su vida pasada.
Todo lo que ella es o fue alguna vez está dentro de ese bolso que descansa en el suelo del bello y rosado salón de belleza de Melody.
"Te veré más tarde."
Indica la bella Melody hacia Jazmín antes de subir unas escaleras laterales.
"Está más presentable mi ayudante?"
Pregunta Pastor mirando solo a Jazmín cuando las dos se acercan.
"Juzga por ti mismo."
Pide Jazmín mostrando con la mano a la mujer a su lado.
"DEMONIOS!"
Exclama Pastor pues no se parece en nada a la escalofriante mujer que conoció cuando llegó, hace como una hora y media atrás.
"Bueno, es un cambio sin duda alguna."
Pastor mira de arriba a la mujer rara.
"Y ha mejorado incluso su aroma!"
"Eso es muy bueno."
Pastor vuelve a besar delicadamente en los labios a Jazmín antes de que ella entre a su habitación para alistarse.
"Bueno, te presentaré con las demás chicas que atenderemos esta noche."
Pastor le indica a la mujer que lo siga.
Ella tenía razón!
El traje sastre que Pastor viste es de color azul deslavado!
El hombre ahora lleva puestas unas gafas en sus ojos que lo hacen ver más guapo e interesante...
"Oye tú, ayudante!"
"Sígueme!"
Grita Pastor pidiéndole a la mujer que camine deprisa.
El tiempo apremia!
El tiempo no se detiene por nadie!
Los clientes casi están a punto de llegar!
Bishop entra y sale de habitaciones sin hacer algún ruido.
Pastor toca una puerta de madera adornada con un cartel de princesas sonrientes y perfectas de cuentos de hadas.
"Puedes entrar Pastor."
Responde una voz melodiosa de mujer que no es la de Jazmín.
Bueno, la mujer ya sabe que hay mujeres en este sitio.
Y que deben ser tan hermosas como Jazmín o Melody, así que ella se prepara para verlas.
Además, ahora que está maquillada y con ropa nueva, hermosa, limpia y perfumada, ella no siente tan insegura de si misma.
Bueno, un poquito insegura...
DE ACUERDO!
Ella está aterrada porque conocerá más mujeres bellas como Jazmín!
Y la poca experiencia con mujeres hermosas siempre fue muy dura, cruel y desastrosa para la pobre mujer en el pasado.
En la fábrica, las chicas bonitas no trabajaban a la par que las demás obreras.
El maldito patrón de la mujer les daba a las chicas lindas trabajo privilegiado de oficina, lejos de las labores extenuantes de la fábrica.
Además, las chicas se burlaban abiertamente de la mujer, aunque ella las ignoraba.
Eso tenía que hacer.
Ignorarlas y seguir trabajando como esclava.
Día tras día.
Semana tras semana...
Mes tras mes...
Años tras jodido año.
"Bueno, aquí vamos."
Comenta Pastor antes de abrir la puerta de la habitación donde están reunidas todas su chicas.
Todas sus bellas princesitas.
Las bellas razones del rotundo éxito de Pastor.
Sus más valiosas posesiones.
"Vamos, tengo que presentarte con ellas."
"Y buscarte un nombre apropiado."
Nombre?
Pastor había sugerido que ella debía o tenia que cambiarse su nombre?
La puerta de madera se abre para que ambos puedan entrar a la habitación que huele como el mismísimo cielo!
***By Liliana Situ***
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