Narrador Cuando Oriana se marchó, ni siquiera notó que Kath se quedó en la fiesta. Para Kath, eso no era un problema. Sin la responsabilidad de ser cuidada por su hermana, podía disfrutar la libertad de desatar el caos. Y ese caos comenzó a vislumbrarse cuando se dirigió con paso decidido hacia la mesa de Erick y su esposa, Sacha. La pareja llevaba casi una década de matrimonio. Erick, apenas con veinte años, había conocido a la deslumbrante Sacha, quien lo había atrapado con el lujo y la opulencia que le ofrecía a cambio de su compañía. En ese entonces, él era joven, inexperto y fácilmente impresionable, y no tardó en casarse con ella, cegado por el brillo de su mundo. Pero el tiempo no perdona, y el amor que una vez sintió por ella se fue desvaneciendo. Sacha, veinticinco años mayor q