Capítulo 13:
Liam
Todo pasó demasiado rápido... Gané la carrera, seguido de Bully y en tercer lugar el idiota de Jayden. Pero ahí no terminó todo, cuando puse un pie fuera del auto, un puño dió en mí rostro haciéndome caer ante el impacto.
Ni siquiera alcancé a verlo venir, me piyaron con la guardia baja, lo único que alcance a ver fue a Jayden sobar sus nudillos después del golpe que me había atinado.
-¡Hijo de puta! -oí la voz de Isaac.
-¡Nos ocuparemos de tí, escoria! -entonces distinguí la voz de Curt.
-Será mejor que te vayas... No quiero tener que pedir tu expulsión Demonio. -habló Bully.
Entonces sentí como mí cuerpo se adormecia, quise hablar pero apenas y pude murmurar algo inteligible.
-¡Liam! -escuché una dulce voz y me perdí en la oscuridad.
[...]
Lia
-¿Por qué hizo eso? ¡Dios! -exclamé molesta, Jayden había golpeado a Liam y ahora el rubio estaba inconsciente.
-Muy sencillo Lia. -gruñó Isaac.- Es la jodida carrera del mes, Liam ha ganado todas desde que empezó éste año, Jayden había sobornado a Fury y Toro para llegar fácilmente al primer lugar pero no pudieron contra Liam.
-¿Qué? No creo que Jayden sea capaz de tal cosa. -Lo defendí.
-Vaya chica, eres estúpida entonces. Jayden y Liam son jodidos enemigos en ésto. -habló un chico que creo se llamaba Parker.
-Oye idiota, cuida tu trato. -murmuró Kennya.
-Está reaccionando... Demosle espacio. -pidió la chica que había verificado el estado de Liam.
Por algún motivo me molesto el ver como ella recorría la anatomía de Liam con un extraño brillo en sus ojos. Me daban ganas de golpearla.
-¿Esas son sirenas? -pronunció alguien entre todo el barullo de gente.
-¡La policía! -alguien gritó.
-Vamos Lia, corre. -Dijo Kennya tomándome del brazo.
Mis piernas reaccionaron por si solas y cuando lo noté, Kennya corría conmigo en dirección a un puente. Oh mierda...
-Salta, hace mucho que no pasa agua por aquí. Podemos ocultarnos. -dijo agitada, la miré desconfiada.- ¡Apresúrate! Nos van a atrapar...
Bufé y salté, caí sobre pasto, al menos eso amortiguó mí caída. Kennya también se lanzó, cayendo al lado mío y entonces de repente lo hizo Ali.
-Joder... Hacía demasiado que la policía no aparecía no encontraban los puntos de encuentro . -gruñó Kennya.
-¿Habrá que cambiar de lugar ahora? -preguntó Ali y fruncí el ceño.
-¿Podrían explicarme de qué carajos hablan? -pedí.
-La boca del diablo ya no será más aquí... La policía bloqueará la zona y seguramente la tendrán controlada por si volvemos... Por lo tanto, debemos buscar otro lugar para nuestros encuentros. -explicó Kennya.
-Shhh... Viene alguien. -susurró Ali.
Ambas miramos sobre el puente, dos policías caminaban con sus linternas buscando dar con algún m*****o de la Boca del diablo. Cuando alumbró para abajo, las tres nos metimos de lleno debajo del puente.
-Que nervios... -susurré.
-Creo que aquí no hay nadie. Deberíamos revisar si éste lugar tiene algún sótano, puede que ahí se oculté alguien. -escuché decir a uno.
-Bien, andando.
Sentí como mi corazón aminoraba sus rápidos latido a medida que los uniformados se alejaban. Cuando los perdimos de vista no pude evitar reír.
-¿Le has dado estupefacientes? -preguntó una voz gruesa haciéndonos sobresaltar.
-Sombra... Joder, nos has dado un buen susto... Y ¡claro que no idiota! En nuestro grupo no se consume esa mierda. -gruñó Kennya.
-Bien. Lia debemos irnos y ahora. -ordenó Isaac.
Aún riendo asentí, era algo tonta mí situación pero cuando sentía muchos nervios luego simplemente reía como una desquiciada. Nos levantamos del suelo y avanzamos camino al auto en el que había corrido Liam.
-¿Dónde está? -pregunté.
-Parker y Curt se lo llevaron para curar su herida. No puede llegar así a casa o Logan sospechará algo. -explicó y asentí.
-Está bien... ¿Qué diremos por lo que tu me acercas a casa?
-Que tus amigas no podían llevarte y se te ocurrió llamar a tu hermoso y buen tío Isaac. -respondió y reí.
-Está bien. Es creíble. -mencioné.
-Espero hoy hayas entendido el porque ninguno de nosotros quiere y respeta a Jayden. -dijo y suspiré. - Comprendo que sea tu chico o lo que sea pero no es bueno, bajo esa apariencia que te brinda hay una persona llena de ambición y avaricia.
-Yo... Tengo tanto que pensar. Jamás me oculté de la policía, no pensaba tatuarme... Por Dios, ni siquiera pensaba en usar éste tipo de ropa hasta mis dieciocho aproximadamente. -murmuré frustrada.
-Lamentablemente ya estás en ésto y debes saber que a partir del momento en que aceptaste ser parte, estás expuesta a todo lo que pueda suceder en ésta mierda. -advirtió.- Liam y yo te cuidaremos, no sé qué tanto lo hará Liam, te has ocupado de alejarlo y créeme, el no es el malo aquí.
Eso lo sabía... Pero debía mantenerlo alejado o caería en algo que no sabía si podía controlar. Estaba a nada de enamorarme de mí jodido hermanastro, algo había avanzado con Jayden, me había ayudado a olvidar un poco al infartante rubio. No podía permitirme retroceder ahora, no cuando sabía que caer, sería mi perdición.
-Liam no es de mi agrado, no existe forma de que el y yo nos llevemos bien. -respondí tajante.
-Pues lo lamento por tí... Bully cuida a los suyos, pero tiene una familia ahí afuera, no arriesgara su culo por tí. -soltó y asentí comprendiendo.- Y yo no estaré siempre Lia... Viajo demasiado, es mí estilo de vida.
-Lo sé... -suspiré.
-Pero Liam siempre estará, aunque tu no lo quieras. Es el único que arriesgaría su maldito pellejo por tí.
-¿Por qué? Nos odiamos, no entiendo porque haría eso. -murmuré intentando no recordar aquella noche donde Liam dijo que yo le importaba.
-Eres el tesoro más preciado de mí hermano. El haberte tenido tantos años lejos, lo hizo apegarse a tu recuerdo... Lo único que tenía de tí y Liam mientras crecía vió como el sufría, no permitiría que algo te sucediera porque eso implicaría un daño a Logan... Y Liam ama a Logan como si fuera su verdadero padre, ¿lo entiendes?
-Pensé mal entonces... -murmuré afligida.
-Oh entiendo a lo que te refieres pero no... Liam está pillado, Darcy lo tiene en las nubes. -comentó Isaac riendo.
¿Quién es Darcy? ¡Mierda! El imbécil del rubio tenía una jodida novia y yo no sabía de ello... Sin dudas, la tal Darcy era afortunada.
Continuará...