La noche en el hospital fue un poco dura ya que las camas de ahí no es que sean muy cómodas que digamos, bueno o esa es mi percepción. Me quito el brazo de James el cual me tenía sujeta a él, tenía unas ganas tremendas de mear por lo que cuando conseguí quitar su brazo fui directa al aseo a hacer mis necesidades ya que mi vejiga me lo estaba pidiendo a gritos. Hago mis necesidades y me lavo las manos para luego salir y dirigirme a donde estaba James. Hoy mis padres venían ya por fin pero no podría verles puesto que tenía que estar con James y no quiero dejarlo en estas condiciones. - Buenos días-Dice en voz baja. - Buenos días¿como te encuentras? - ¿Has estado llorando?-Cambia de tema-¿que ocurre? - No ocurre nada, solo que estaba ocupada-Muestro una sonrisa forzada. - Odio las mentir