Cuando se terminó la pelea James y yo nos fuimos por un lado y Jess y John por el otro. Al terminar le curé a James todas las heridas y le puse una pomada especial para que al día siguiente no le saliera ningún moretón. Este se da una ducha rápida y sale solo con la toalla enrollada en la cintura, mis ojos miran todos los tatuajes que tenía en su cuerpo, me acerqué a el y le empecé a tocar uno por uno. Dios mío este chico era perfecto de los pies a la cabeza. Veo como se empieza a vestir con unos pantalones negros y una sudadera gris, era la misma que se compró estando conmigo en el centro comercial. -¿Tenes algún sitio pensando para esta noche?-Pregunto. -Tranquila muñeca que te gustará el lugar, eso tenlo por seguro. Me acerco a poso mis labios en sus labios para besarle, este acepta