Narrador Katherine comenzó a negar con la cabeza, apretando con fuerza el brazo de Leandro. —¿Qué está haciendo aquí esa mujer? —murmuró, claramente molesta. Stella, sorprendida por la misma escena, frunció el ceño y masculló: —Ya sé por dónde va todo esto... ¡mierda! Leandro la miró también, de arriba abajo, tan atónito como los demás. Zafándose del agarre de Katherine, avanzó hacia ella, con su rostro endurecido. —¿Qué estás haciendo aquí, Danielle? No tienes nada que buscar aquí. Este es un juicio privado. Danielle, con su vientre abultado y una presencia que no pasaba desapercibida, le devolvió la mirada, escrutándolo con calma antes de posar sus ojos en Katherine, quien estaba ardiendo de la rabia por su presencia. —Bueno, Leandro, tu juicio será privado, pero soy uno de los