CAPÍTULO DOCE
Como en este momento el caso se encontraba en un estado de comprobación de archivos y de espera a los resultados del forense, Mackenzie decidió regresar a DC. Una vez allí, se detuvo a visitar a Barry Burke en la oficina del examinador médico para ver si las cosas estaban más claras con respecto al cadáver de Kenny Skinner. Solo fue un viaje de unos setenta minutos; si surgía alguna cosa en Kingsville mientras ella estaba fuera, podría estar de vuelta en una hora.
Salió de Kingsville con todo esto en mente. En un segundo plano, también era consciente de que quería regresar para ver cómo estaba Ellington. Hablar por teléfono con él era una cosa, pero después de haber sido amantes durante varios meses y compañeros de trabajo incluso más tiempo, podía captar muchas más cosas e
